EL PAíS

Un dilema ético para la ciencia

- FLORENCIA LUNA*
El descubrimiento desarrollado por los científicos de Corea del Sur es una línea de investigación prometedora porque va a permitir revolucionar la forma de hacer medicina y se manifiesta como la puerta de entrada de un sistema de reparación que puede resolver enfermedades. De todas maneras, hay que ser cautos porque estas investigaciones están dirigidas a cierto nivel de la población. Estos descubrimientos no son de amplio acceso. Por lo tanto, hay que poner en perspectiva que hay una serie de tratamientos y curaciones que ya existen y no se utilizan. No hay que entrar en una sensación de exitismo y fascinación que no nos permita ver dónde están los problemas más acuciantes en salud, sobre todo, en países de pocos recursos, como la Argentina. En estas prácticas científicas tienen que haber regulaciones para evitar excesos. Es necesario que haya un debate público para ver qué es lo que puede brindar este tipo de tecnología, ya que se viene y no se puede evitar. Pero el acceso a esto estará ligado a las necesidades de los países industrializados.
* Presidenta de la Asociación Internacional de Bioética.

- GREGORIO KLIMOVSKY *
El desarrollo de la personalidad del feto se empieza a formar cuando se forma el sistema nervioso y antes no es un ser humano sino que tiene células como las puede tener la lechuga. En las primeras semanas del embrión no hay ser humano y aquí, entonces, es posible usar células madre con fines de clonación para reproducir la piel o combatir enfermedades. Pero después de llegar a cierto momento hay que tener cuidado. Mi posición es bastante tolerante porque el proceso realizado con las células madre se hace con el consentimiento de a quien se les toma esas células. No veo un problema ético en esto, pero cuando se forma el sistema nervioso central hay que tener cuidado. De acuerdo con la mayoría de los médicos, el desarrollo del sistema nervioso del embrión comienza a los tres meses. A partir de este desarrollo ya hay que tener mayores cuidados y evaluar el proceso más profundamente. En la religión, por ejemplo, el ser humano aparece en el momento de la concepción. Pero si no se está en esa posición, puede ser importante que se use la clonación con fines terapéuticos o con el objetivo de combatir enfermedades a través del traspaso de genes.
* Profesor de Filosofía de las Ciencias de la UBA.

- JUAN CARLOS TEALDI *
Hay que separar bien lo que es clonación celular de lo que es clonación de un embrión. En el primer caso no hay conflicto en la comunidad científica, ya que se realiza con el objetivo, por ejemplo, de clonar la piel a través de células epidérmicas. Con la clonación humana, que consiste en crear un ser humano con características genéticas idénticas al tomado como referencia, empieza el problema moral. La clonación humana a secas está condenada mayoritariamente. Están los países que dicen que la clonación humana es condenable en cualquier circunstancia, como Estados Unidos, secundado por muchos países de América latina y, por otro lado, están otros como el Reino Unido y China, que acuerdan con la clonación con fines terapéuticos. Es muy difícil tomar una postura determinante. No creo que deba haber una condena dogmática. Debe haber un gran debate, un consenso para el conocimiento público de lo que se hace. En Gran Bretaña se permite la clonación porque existe una regulación. Hay otros países como España en los que hubo un debate enorme, pero que aún no han resuelto el tema.
* Director del Programa de Bioética del Hospital de Clínicas.

- PEDRO HOOFT *
Hay un consenso internacional en bioética que considera inaceptable la clonación reproductiva, que tiene por finalidad generar nuevos seres humanos. La declaración sobre genoma humano de la Unesco y protocolosadicionales a la Convención Europea de Bioética se expresan contra la clonación reproductiva. En el campo de la clonación terapéutica hay variantes y opiniones divergentes. Todas las técnicas que no impliquen embriones humanos, con miras a la curación de enfermedades, no cuentan con objeciones. Pero si partimos de embriones humanos hay opiniones divididas. Si un embrión humano es vida, hay una objeción ética, aunque el destino posterior sea para fines terapéuticos. Los documentos internacionales han dejado abierto el tema para nuevos aportes interdisciplinarios. Por lo pronto, en países donde hay una tendencia más abierta hay, de todos modos, consenso de que no se puede clonar indiscriminadamente. A partir de normas institucionales, debería haber objeciones éticas y jurídicas cuando implica la destrucción de embriones humanos. Si se encuentran técnicas de clonación terapéutica sin destrucción puede ser muy beneficioso. De todos modos, estos desarrollos en el futuro deben tener un sentido social con mayor acceso de la población y no tan restringidos.
* Juez, integrante del Comité Internacional de Bioética de la OPS.

- ESTHER DÍAZ *
Este es un proceso que históricamente se da desde el comienzo de la modernidad porque triunfa la tecnociencia. Hay varios investigadores que dicen que la ciencia es neutral y que no son responsables de la técnica que crean. A través de la informática se genera la ingeniería genética. Y los resultados son imprevisibles. El científico no tiene una reflexión ética, por lo que se le va de las manos la tecnología que él mismo inventó. Hay comités de ética, pero que funcionan una vez que el invento está comercializado, por lo que no hay manera de revertir las consecuencias de ese invento. Antes de ponerse a tratar de producir vida de manera artificial sería más humano, que es justamente lo que le falta a la ciencia, que se invierta en investigaciones humanísticas y de ciencias humanas para determinar las verdaderas necesidades de la sociedad y a partir de ahí realizar las investigaciones. Además, es una falacia que los científicos no tengan responsabilidad de su invención. Habiendo tantos chicos que se mueren de hambre, no acuerdo con la posibilidad de crear vidas de manera artificial. Es el resultado de una ciencia inhumana al servicio del mercado.
* Escritora y doctora en Filosofía.

- SAMUEL CABANCHIK *
Cuando el poder de los medios utilizados para la ciencia se incrementa, debe aumentar también la responsabilidad con que se utilizan esos medios. Asegurando a la opinión pública que esta clonación es para fines terapéuticos se la tranquiliza, pero nos enfrenta de todos modos a un dilema ético y político. Debe haber una regulación en este tema, pero también se debe alcanzar un gran debate y una reflexión general. Deberían intervenir, además, organismos internacionales para que esta regulación sea acordada a nivel mundial, porque son cuestiones que atañen a la humanidad misma. Tiene que haber un foro de debate. En la Argentina, específicamente, primero se debe comenzar con este debate para llegar luego a tomar posición. Todavía este tema no ha tomado estado público. Además, si el cuestionamiento de Carmen Argibay para ir a la Corte Suprema después de declararse a favor del aborto no está saldado, mucho menos se está preparado para discutir la manipulación genética.
* Director del Departamento de Filosofía de la UBA.

Producción: Maricel Seeger.

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