futuro

Sábado, 10 de enero de 2004

LA NO TAN PROMOCIONADAMISION STARDUST

Visita a un cometa

 Por Mariano Ribas

El revuelo provocado por el sensacional desembarco de la nave Spirit en Marte eclipsó, injustamente, otra misión espacial, mucho menos vistosa, pero igualmente significativa: el 2 de enero, y tras casi cinco años de viaje, la sonda Stardust de la NASA sobrevoló a un cometa. Y no sólo transmitió a la Tierra las imágenes más nítidas jamás tomadas de estas “bolas de nieve sucias”, sino que también capturó muestras del polvo eyectado desde su superficie. Dentro de un par de años, la nave regresará a nuestro planeta con esa preciosa carga.
La nave espacial Stardust (“Polvo estelar”) fue lanzada el 7 de febrero de 1999. Y desde entonces viajó más de 2000 millones de kilómetros por la parte más interna del Sistema Solar. Finalmente, el 2 de enero interceptó a su objetivo final: el cometa Wild 2 (que en realidad se pronuncia “Vilt”). En su fugaz encuentro, la nave, viajando a 22.000 km/hora, pasó a sólo 240 kilómetros del cometa. Las imágenes tomadas por sus cámaras (ver foto) revelaron un objeto de poco más de 5 kilómetros de diámetro, pasablemente esférico, y cubierto de cráteres y depresiones. “Son las mejores imágenes que se hayan tomado de un cometa, y los detalles que se ven exceden todo lo que esperábamos”, dice Donald Brownlee, investigador principal de la misión Stardust. Y agrega: “Estas vistas nos abren una nueva ventana para entender mejor el funcionamiento de los cometas”. Al mismo tiempo que fotografiaba al Wild 2, la sonda utilizó una especie de red de un material ultraliviano (conocido como “aerogel”) para capturar las minúsculas partículas arrojadas constantemente por el pequeño y helado astro.
Poco después de su breve pero valiosa misión, la intrépida navecita inició su largo viaje de regreso, que la traerá a la Tierra recién en enero de 2006. En ese momento, una cápsula con el botín cometario se separará, y aterrizará con un paracaídas sobre el desierto de Utah, Estados Unidos. Será verdadero oro en polvo para los astrónomos, porque los cometas son reliquias de los orígenes del Sistema Solar. Y el análisis de las muestras del Wild 2 podría echar un poco más de luz sobre el tema: “Las imágenes de la Stardust nos han sorprendido –dice Brownlee– pero estoy seguro de que, cuando esas muestras lleguen a la Tierra, habrá muchas más sorpresas”.

Compartir: 

Twitter

 
FUTURO
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.