Quemaría las camas de parto nada orgánicas y la deshumanización de la práctica médica que visibilizan la relación asimétrica que hay hoy entre el profesional de la salud y las mujeres: el error de confundir a una embarazada con una enferma.

Son prejuicios que limitan e impiden otro tipo de prácticas, más humanas y naturales.

Estos prejuicios que llevan a la violencia, lamentablemente, son una característica de nuestras sociedades: hacen una falsa interpretación del mundo. No son críticos, ni claros, ni profundos. Conllevan a enunciar de forma negativa y no constructiva.

No hacen aportes sino que destruyen. Se focalizan en encontrar sólo errores.

¡También volvería a quemar los corpiños!

Coreógrafa y bailarina, este viernes a las 20.30 estrena Barro en el Centro Cultural Borges: Viamonte 525 C.A.B.A. Reservas: 5555-5359.