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Viernes, 14 de enero de 2005

CONSEJITOS DE MARU BON BON

Las chicas sólo quieren/mos divertirse/nos

Arrollador verano, amiguetes! ¡Avasalladora estación estival, congéneres míos y de los/es otros/es! El sopor anula los sentidos, el desnudo es poco menos que una necesidad urgente lejos del jolgorio y los buenos hábitos de nosotras/os/es amantes de Eros/as. Aun así, mis queridisísimos/as/es personas sexuadas de la manera en que sea, una vida y solo una es lo que nos toca, y ya que nos toca devolver el toqueteo es casi un deber ciudadano/a. ¡Pero con buena disposición, adorables, que lo que el sudor tiene de salado vive de lo que fue gozado! Y las chicas, protagonistas de esta entrega, merecen acción, de la que sea:
1. Esta Ud. cansado/a, agobiado/a, apenas puede mover un dedo ¡Suficiente!: las chicas tenemos la ventaja de contar con una amplia superficie disponible sobre la cual aplicar la caricia incluso de un humilde dedo. Y aún más ¡un dedo basta para empujarlas al cielo! Sólo deben ponerlo en el lugar correcto, picarones/as, pero no insistan en adivinar, preguntando se aprende mejor.
2. ¿Harta/o de asistir al espanto cotidiano? ¿Crisis de llanto frente al televisor? ¡las chicas tienen la respuesta!: Sencilla y efectiva manera de huir del mundo exterior encontrará Ud. entre las piernas de su chica. Hunda la nariz, sienta la humedad, deje que los muslos anulen sus oídos y déjese llevar por la sensación más antigua que seguro Ud. recuerda en algún pliegue de su laberíntica mente.
3. Está usted permanentemente bañado/a en sudor, pringoso/a, resbaloso/a ¿Y qué más pueden querer ellas?: ¡Ay, mis amiguitos/as! ¿cómo puede alguien detener su impulso por tan chabacana excusa? ¡A las chicas nos gusta mojado, nos deslizamos (o se deslizan) mejor por lo bañado, nuestro segundo nombre es humedad y pringosa el apodo de las audaces. Así todo lo que se toca patina, se desplaza, se menea, cachondea y bambolea como tan bien lo dijo alguna vez ese poeta. ¡A frotarse más es la consigna!
4. Ud. se queja de que en verano todo se derrite, se apachucha, luce mustio y sin vigor ¿Y qué le hace creer que eso les importa tanto a las chicas?: No, no, no, no y no. Como dijimos antes, un revoleo de plumas, un dedo en el lugar adecuado, un hielito en las partes y cualquier cosa que se le ocurra puede reemplazar eso que Ud. cree tan fundamental, incluso sus burdas imitaciones. No es que no nos guste, a no ofenderse, sólo que sepan de una vez que no es condición sine qua, al contrario, es menos importante que la buena disposición y mucho menos que el ánimo explorador, el buen humor y el espíritu de aventura. Que sin eso, no somos nada.

Además, amiguete/ta/s, a la vuelta de tu calle también hay uno de esos sitios que podrán ser chabacanos ¡pero tienen unos aires acondicionados!

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