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Lunes, 13 de agosto de 2007

FúTBOL › ARGENTINOS JUNIORS PUSO MUCHO CORAJE PARA GANARLE A BOCA EN LA PATERNAL

La cancha es chica, el corazón es grande

Dos goles de Battión y uno de Delorte le permitieron al equipo de La Paternal superar a Boca, que convirtió dos veces a través de Ledesma. Fue un partido intenso, con la pelota en permanente vuelo y muchas situaciones de gol, producto de más errores que aciertos. Boca extraña cada vez más a Riquelme.

 Por Facundo Martínez

Alta en el cielo. Así vieron la pelota los defensores centrales de Boca durante el partido. Y también inalcanzable, si con ellos saltaba a cabecear el gigante Alejandro Delorte, la figura del triunfo de Argentinos –con un golazo de cabeza y dos asistencias perfectas para los goles de Battión–, 3-2 en La Paternal ante un Boca que sigue sin encontrar cómo suplir la ausencia de Riquelme.

Lo había anunciado el DT de Argentinos, Ricardo Caruso Lombardi, y se había hecho cargo el técnico de Boca, Miguel Russo: Argentinos había planeado complicar a Boca con sus torres más altas y, siguiendo la receta al pie de la letra, le alcanzó para llevarse los tres puntos ante un Boca que se presenta cada vez más desdibujado.

Delorte y Gianni eran los encargados de bajar los pelotazos que volantes y defensores propios descargaban sobre el área de Caranta, donde ni Maidana ni Ledesma, y mucho menos Ibarra y Morel, conseguían controlar la lluvia de pelotas: Boca sufría más de lo que jugaba. Sin embargo, luego de varios intentos del local, fueron los visitantes los que abrieron la cuenta con un buen remate de Ledesma, que segundos antes había metido un cabezazo cerca y era, sin dudas, de lo mejor de la visita.

En la jugada del gol, desconcertó a la defensa local un clarísimo penal de Scotti sobre Palermo, que el árbitro Saúl Laverni dejó pasar, porque era imposible no verlo, y que los jugadores boquenses reclamaron con énfasis mientras Cardozo aprovechaba para habilitar a Ledesma.

Por lo hecho, era injusta la ventaja de Boca pero, y quizá por eso, duró apenas unos minutos. Porque Delorte saltó y ganó en el área y convirtió un pelotazo largo en el empate, con un tremendo cabezazo que se metió por el palo izquierdo del arco de Caranta. El gigante de Argentinos estaba frente a una gran tarde. Y tuvo varias más chances para anotar, como la que, tras ganarle la posición a Maidana y parar la pelota con el pecho, se dio vuelta y sacó un remate apenas por arriba del travesaño.

Con los centrales controlados y los laterales recargados de trabajo, el fútbol de Boca sufría descompensaciones. Banega no era el diez, por más que lo intentara; Cardozo ayudaba poco, Battaglia aguantaba en el medio la pelea con Ortigoza, y Ledesma era puro corazón y apenas algo más. Palermo y Palacio complicaban poco y los buenos tiros libres ejecutados por Morel encontraban respuesta en el arquerito Navarro.

El gol de Battión fue un baldazo de cubitos para los de Russo. Lo metió el volante, pero el constructor fue Delorte, que bajó la pelota y aguantó la descarga para que su compañero definiera. Fue parecido el tercero, sólo que esta vez Battión quedó mano a mano frente a Caranta, que salió a achicar, y no pudo evitar el toque sutil del volante por el costado. Antes del tercero de Argentinos, Ledesma había puesto el 2-2, de penal, que no sirvió porque Boca no le iba encontrar la vuelta al partido ni aun jugando 30 minutos más.


Estadio: Argentinos.

Arbitro: Saúl Laverni.

Goles: 13m y 54m, Ledesma (B), el segundo de penal; 14m, Delorte (A); 48m y 72m, Battión (A).

Cambios: 59m, Abán por Gianni (A); 78m, Dátolo por Cardozo y Boselli por Banega (B); 79m, Prósperi por Barzola (A); 90m, Caruzzo por Pereira (A).

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La síntesis del desorden de Boca de ayer. Morel se va, Banega y Silvestre discuten, Palermo mira sin entender...
 
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