El Grand Prix de Hungría, décima carrera del Mundial de Fórmula 1, pareció una competencia de otro campeonato: Jenson Button apenas si sumó dos puntos, Sebastian Vettel abandonó y en los dos primeros lugares llegaron un McLaren y una Ferrari, impensado en lo que va de 2009: los últimos dos campeones mundiales, Lewis Hamilton y Kimi Raikkonen, se quedaron con los puestos de privilegio, en una jornada en la que continuó sobrevolando la preocupación por la salud del brasileño Felipe Massa, que no pudo tomar parte del Grand Prix (ver aparte).

“Ha sido una sensación increíble volver a estar aquí después de todo”, dijo Hamilton, quien reconoció que el equipo McLaren no esperaba ganar en Hungría, pero que una vez en la pista se dieron cuenta de que el coche iba “fantástico”. Fue la primera victoria del campeón del monarca en 2009. “No cambia nada en el Mundial, pero es un gran resultado para nosotros”, señaló.

Raikkonen no pudo con su Ferrari contra el actual campeón. “El coche no era malo, pero todavía no es lo bastante rápido para ganar”, se lamentó. “Estoy complacido con el segundo puesto, pero no estoy totalmente satisfecho, porque yo siempre corro para ganar”, dijo el finés, que admitió la importancia de un resultado semejante para Ferrari tras “un fin de semana difícil” a causa del accidente de Massa.

Si Hamilton y Raikkonen dispusieron de cierta dosis de fortuna, no la contó consigo el español Fernando Alonso, que había largado desde la pole position: después de su primera parada en boxes, cuando iba punteando el Grand Prix, perdió una rueda y tuvo que abandonar. Alonso no quiso criticar a sus mecánicos: “Hay que pensar que a veces se ganan carreras en los boxes”. Pero el equipo Renault fue suspendido por una carrera, el próximo GP de Europa, por mandar un auto inseguro de vuelta a la pista.

Jenson Button, que se impuso en seis de las siete primeras citas del año, está acusando la falta de liquidez económica de su escudería, lo que impide que el Brawn se desarrolle al mismo ritmo que los demás. El equipo tiene un problema con los neumáticos, a los que no consigue dar temperatura suficiente en la carrera y por esa razón pierde adherencia y velocidad en curva. “Después de cuatro vueltas ya no tenía más gomas”, se quejó el inglés, que fue séptimo. Su compañero Barrichello acabó décimo.

El gran triunfador del fin de semana en la pugna por el título es Webber, que no sólo se situó como perseguidor directo de Button y recortó diferencias sino que confirmó las buenas sensaciones de las últimas carreras. “Yo esperaba ser un poco más rápido”, dijo el australiano, sorprendido por las performances de McLaren y Ferrari. Su compañero Sebastian Vettel tuvo que abandonar con un problema en la suspensión ocasionado tras un toque con Raikkonen en la primera curva.

El español Jaime Alguersuari, el debutante más joven de la historia de la Fórmula 1, terminó una carrera sin alternativas en el 15º lugar sobre 17 clasificados. “En las últimas cinco vueltas se me complicó con el físico.”

La Carrera

F-1. 10ª fecha, GP de Hungría.

Budapest, 70 vueltas, 306,638 km.

Promedio del vencedor: 186,973 km/h.

Record de vuelta: Webber, en la 65ª, 1m21s931 a 192,498 km/h.

Campeonato: Button, 70 puntos; Webber, 51,5; Vettel, 47; Barrichello, 44; Rosberg, 25,5; Trulli, 22,5.

Constructores: Brawn-Mercedes, 114 unidades; RedBull-Renault, 98,5; Ferrari, 40; Toyota, 38,5; McLaren, 28; Williams-Toyota, 25,5.

Próxima carrera: 23 de agosto, en Valencia.