El alemán Sebastian Vettel dio ayer un paso más hacia el título mundial de Fórmula 1 al terminar segundo en el revuelto Gran Premio de Hungría, donde el triunfo fue para el británico Jenson Button. El español Fernando Alonso completó el podio en el Hungaroring, donde Button logró su undécima victoria en la máxima categoría del automovilismo, justo en su Gran Premio número 200.

“Un perfecto comienzo de las vacaciones de verano. Volvamos luego y ganemos todas las carreras”, bromeó Button en la radio tras su victoria, que revive mínimamente sus escasas posibilidades de título. No obstante, Vettel les ganó la partida de poker en la que se convirtió el cambio de neumáticos en Hungría a sus principales rivales por el campeonato. El alemán puede sentirse ganador en un circuito que la intermitente lluvia hizo muy difícil.

Con su décimo podio en once carreras, el piloto de Red Bull aumentó más su enorme ventaja al frente del Mundial. Vettel afrontará la pausa de cuatro semanas en el campeonato con 85 puntos de ventaja sobre su compañero de equipo, Mark Webber, que ayer fue quinto. El británico Lewis Hamilton, a quien una errónea estrategia con las gomas y un par de errores de conducción le costaron la victoria, defendió su tercer puesto en el Mundial al cruzar la meta en cuarto lugar, aunque está a 88 puntos de Vettel. Alonso sigue cuarto, a 89.

“Por supuesto, estoy contento con el segundo puesto por lo que significa para la clasificación. Pero no estoy del todo feliz”, admitió Vettel. “Me corroe un poco porque tengo la sensación de que podía ganar”, indicó el actual campeón. Button y Vettel, que partió de la “pole”, tuvieron la mejor estrategia en la segunda parte de la prueba al escoger neumáticos duros y mantenerlos incluso con una ligera lluvia. La carrera estuvo llena de patinazos, paradas en boxes, errores de estrategia y cambios de liderazgo.

Al final fue de nuevo un McLaren el que subió a lo más alto del podio, lo que introduce algo de emoción a un campeonato con claro sabor a Red Bull. “No nos gusta que McLaren haya sido tan competitivo en las últimas carreras”, advirtió Vettel, defensor del título. “Ya no tenemos el coche más rápido.” Tampoco Alonso tira la toalla. “Soy optimista para la segunda parte del campeonato”, remarcó el bicampeón mundial. “En las últimas tres carreras he sido el mejor piloto”, añadió el de

Ferrari, que en Gran Bretaña fue primero y en Alemania, segundo.

Pero ayer el mejor fue Button, un artista bajo la lluvia. “Por alguna razón me gustan estas condiciones. No sé por qué”, reconoció el británico, que en 2006 ganó su primera carrera también en Hungría en circunstancias similares. Vettel arrancó bien y defendió su primera posición en la parrilla ante el dúo de McLaren. Pese a la lluvia, Hamilton atacó intensamente y puso bajo continua presión al campeón, que al final cedió en el quinto giro.

Las condiciones de la pista causaron problemas a casi todos los pilotos, pese a que empezaron con neumáticos intermedios. Uno tras otro fueron patinando, a veces también sobre el pasto. Tras once vueltas, con el asfalto algo más seco, algunos se arriesgaron a cambiar a los “slicks”. En el giro 47, la situación volvió a complicarse con la lluvia. Hamilton perdió el control y vio cómo Button lo pasaba y Vettel se acercaba. Como al principio, los coches resbalaban por todas partes. En ese contexto, Hamilton y algunos otros pilotos decidieron volver a las ruedas intermedias: un error, como pronto quedaría demostrado, con el triunfo de Button y el segundo puesto de Vettel.

La Carrera

F-1, 11ª fecha,
Hungaroring
de 4381 metros
70 vueltas

Promedio del ganador: 172,416 km/h.

Campeonato de pilotos: Vettel, 234 puntos; Webber, 149; Hamilton, 146; Alonso, 145; Button, 134.

Copa de Constructores: Red Bull, 383 puntos; McLaren, 280; Ferrari, 215; Mercedes, 80.

Próxima fecha: 28 de agosto, en Spa Francorchamps (Bélgica).