Con más golpes de escena que atractivos en la pista, el Turismo Carretera pasó por el flamante autódromo de La Pampa, ante una multitud que la policía provincial estimó en más de 70 mil personas. La victoria de Juan Bautista De Benedictis no resiste objeciones, la definición del título 2012 –queda una carrera en La Plata, con puntaje especial, y ocho pilotos en pugna– merece el análisis:

Matías Rossi (Chevrolet, 62,50 puntos): Los golpes de escena de la carrera lo catapultaron a la cuarta posición, pero su Chevrolet parece haber perdido el alto nivel de la fase regular. En condiciones normales estaba para ser octavo. La ventaja que lleva al tope de la Copa de oro no le asegura tranquilidad para la última fecha. “Sacamos dos situaciones complicadas adelante y seguimos al frente de la Copa de Oro. Pero si no mejoramos, vamos a perder la punta”, aceptó, en lo que resulta un aviso a su dotación técnica.

Agustín Canapino (Chevrolet, 57): Un desborde emocional derivó en un trompo y así perdió el arrecifeño su enorme chance de triunfo, que necesita para ser campeón. Van dos carreras seguidas en las que no puede explotar la pole-position. La rotura del motor cerró negativamente el domingo. “Una lástima, pero conservo intactas las chances y a La Plata voy a ir a todo o nada.”

Juan De Benedictis (Ford, 56,50): Casi sin quererlo, el necochense se transformó en el principal as de Ford para aspirar al título. Habrá que ver cómo reacciona ante esta situación límite. En La Pampa manejó un auto impecable, en La Plata siempre camina bien. “Es doble el mérito al habernos acercado a los punteros, pero además al haber sacado a quienes no tienen la victoria la posibilidad de conseguirla”, explicó el vencedor. ¿Y la presión? “El que viene es un circuito que me gusta mucho y si tengo el mismo auto que acá...”

Mauro Giallombardo (Ford, 54): Hipotecó sus chances cuando cometió el error de la largada en la primera serie, adelantándose a Canapino. Tenía un autazo, como demostró en la final, pero en el pelotón perdió al ser víctima del despiste de Mariano Werner. Terminó 14º; está obligado a conseguir el triunfo, y aun así ver qué pasa con los rivales. “Teníamos potencial para ganar. Ahora voy a tener que ir a buscar una victoria en La Plata”, se lamentó.

Christian Ledesma (Chevrolet, 51,50): Un fin de semana de menor a mayor en La Pampa lo mantiene con expectativas –acabó noveno–, aunque tiene que descontarle mucho a Rossi y su auto parece caminar menos que el de su compañero Canapino. Va a precisar muchas combinaciones favorables para poder ganar su segundo título. “Tenemos que intentar ganarlo todo”, prometió.

Guillermo Ortelli (Chevrolet, 45,50 puntos): Tras su octavo lugar en La Pampa, sus chances son matemáticas, sin la contundencia del mejor Ortelli, desdibujado desde hace rato. También le hace falta una victoria para poder aspirar al título.

Norberto Fontana (Torino, 42,50 puntos): Hizo una carrera bárbara para avanzar casi 20 puestos en el pelotón, fue undécimo, pero el Torino no demuestra el paso firme de la etapa regular. Veinte puntos menos que Rossi son muchos para descontar.

Gabriel Ponce de León (Ford, 37,50): Su candidatura es testimonial. Aunque ayer haya terminado en el escalón más bajo del podio, el Ford que maneja es el que menos rinde entre los autos del Lincoln Sport Group, y sólo un encadenamiento de milagros podría ayudarlo. “Si bien estamos lejos, podemos soñar con hacer algo lindo en La Plata. Las carreras hay que correrlas y todo se puede”, se ilusionó.

Quedaron fuera de combate Castellano (21,50), Aventín (18,50), Girolami (17,50) y Alaux (13,50). En La Plata se decide.

La Carrera

Promedio del ganador: 193,807 km/h.

Record de vuelta: Canapino (Chevrolet) en la 11, 1m16s809 a 194,415 km/h.

Ganadores de series: Canapino; De Benedictis; Spataro (Dodge).

Copa de Oro: Rossi 62,50 puntos, Canapino 57, De Benedictis 56,50, Giallombardo 54, Ledesma 51,50, Ortelli 45,50, Fontana 42,50, Ponce de León 37,50, Castellano 21,50, Aventín 18,50, Girolami 17,50, Alaux 13,50.

Ultima carrera: 2 de diciembre en La Plata.