radar

Domingo, 28 de agosto de 2016

FAN › UN ARTISTA ELIGE SU OBRA FAVORITA: CARLOS HERRERA Y DOS DIBUJOS, DE FELICIANO CENTURIóN

UN HOMBRE LLAMADO CABALLO

 Por Carlos Herrera

Dos dibujos de Feliciano Centurión me acompañan en la vida y en mi cuarto. Ambos cuentan de modo singular la idea de relación. Uno de ellos establece el vínculo de pares que entre dos potros se establece en un corral, y el otro una mirada del cuerpo masculino erotizado que sobre una cama se expresa.

Contextualizar estos dos dibujos en la vida del autor me hace fantasear con dos momentos de su vida y también de la mía; por un lado en su relación con lo popular y con lo que le es familiar y por el otro con el placer y lo sexual. Niño y joven.

El dibujo titulado “Corral” pareciera ser el boceto de una de sus frazadas de dos plazas pintadas a mano en donde dos potros vistos desde una perspectiva singular se aproximan uno al otro dentro de un reducido corral. Lo previo a un acontecimiento de relación, de aproximación y de contacto se manifiesta en el escorzo de estos potros. Uno de ellos tiene muy remarcado el ojo y ambos poseen las crines de sus colas muy gestuales. Uno de ellos da la sensación de moverla como lo suele hacer mi perro Remo cuando está contento. El corral que en su precariedad simbólica genera los recursos justos para ser entendido como tal, otorga a la imagen un contundente aplomo y control.

Cada invierno al entrar a diario a mi cama y al contemplar esa obra pienso en ese dibujo que emerge de la frazada y me entrego a un mundo imaginario donde ese corral son ahora los muros de mi cuarto y la cama el terreno de relación. Es como si esos potros emergieran en tres dimensiones y se apoderaran de todos mis recursos para construir en mí un espejo de mi propia realidad, deseo y sexualidad. La obra me mira y me dicta pura fantasía popular y animal. Ahora somos cuatro en el cuarto entonces.

En verano me resulta más atractiva la otra obra, la del cuerpo masculino erotizado ya que ésta obra retrata a un hombre lleno de líneas curvas que en posición muy sensual goza al futuro próximo. Pidiendo ser mirado, su cuerpo pareciera estallar al tomarse de los rotundos barrotes de la cama. En este dibujo el cuerpo no reposa sobre una frazada de las clásicas usadas por Centurión sino que el personaje se encuentra sobre una cama con sábana que tiene dibujadas pequeñas e ingenuas flores conformando el estampado de la misma.

Este dibujo también posee un punto de vista particular de perspectiva. Un punto de vista alto. Pienso en la posibilidad de que este dibujo fuera creado desde el apunte de un cuerpo vivo que frente a Feliciano se manifestó o tal vez pueda ser un apunte de una imagen fotográfica de revista. Lo que si tengo en claro es que no fue producto de la imaginación del autor ya que esta obra posee una mirada detallada, realista y cargada de placer vívido. La fantasía estuvo puesta en el diseño de las flores del estampado de las sábanas que rodean a este cuerpo escultórico. Pedazo de cuerpo erotizado sobre sabana floreada. ¡Puf!

Prefiero guardar silencio sobre los detalles, historias y anécdotas que poseen estas obras, tienen muchos momentos espejados y que no tendría sentido develar ya que forman parte de mis íntimos momentos de relación. Pero sí es importante contarles que el poder que tienen sobre mí es ridículamente hermoso e inspirador para crear mis obras.

Compartir: 

Twitter

SUBNOTAS
 
RADAR
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.