soy

Viernes, 26 de julio de 2013

La besada del diablo

Una multitud de besuqueiros chapándose los unos a los otros, y las unas entre sí, recibieron al papa Francisco en Brasil. En este lenguaje de lenguas protestaron por una Iglesia conservadora e indiscreta que se mete en las alcobas de sus fieles y que, entre otras atrocidades, ha metido su cola en el proyecto antiabortista conocido como “beca violación”, que prohíbe el aborto en caso de violación y concede al violador derechos de padre.

 Por Camila De Carli

Desde Río de Janeiro

Un besazo masivo y facebookonvocado fue organizado el lunes para recibir al Papa en las calles de Río. Cerca de doscientas personas, muchxs de ellxs estudiantes entre veinte y treinta años, empezaron a caer a partir de las seis de la tarde en la Iglesia de Nuestra Señora de la Victoria en el Largo de Machado, en el sur de la ciudad, y a rodear la entrada. Algunos llegaron disfrazados de Jesús y otrxs como novicias de clausura, que charlaron e intercambiaron lenguas con chicas sin remera. Se besaron entre banderas del arco iris y carteles con frases como “Meu cu é laico”, “Em cada beijo uma revolução”, “A porra da buceta é minha”, esto último significa, en un slang muy brasileño, algo así como “esta concha es mía”. ¿El móvil? recibir a Francisco con plumas y lengüetazos en la ciudad carioca.

Antes de partir hasta el Palacio de Guanabara (donde iba a reunirse el Papa con las autoridades brasileñas), la manifestación se focalizó en las escalinatas de la iglesia, que momentos antes habían sido ocupadas por los peregrinos de la Jornada Mundial de la Juventud. Allí, dos chicas en cueros fueron las que abrieron el besuqueo con un chupón ruidoso al grito de “La verdad es dura / el Papa apoyó a la dictadura”. A lo que los chicos católicos respondieron agarrándose de las manos y rezando aun con más intensidad. No faltaron los besos hétero, pero sí los trans. Las lesbianas estuvieron casi o tal vez más a la vista que los hombres. También mañana, grupos feministas marcharán en Copacabana contra la violencia de género, la homofobia y por la legalización del aborto.

Actualmente, la Comisión de Derechos Humanos de Brasil está presidida por Marco Feliciano, una figura tan popular como racista, fundador de la Iglesia Pentecostal de San Pablo y diputado por el Partido Social Cristiano. El es el mismo que presentó el proyecto, finalmente vetado, para la “cura gay”. Si bien Feliciano es evangélico, es sólo la cabeza visible de algo mucho mayor. Hay todo un caudal de políticos que hacen lobby en la Iglesia Católica y que ahora quieren aprobar el estatuto del no nacido. Se trata de un proyecto conocido como “beca violación”, que prohíbe el aborto en caso de violación, concede al violador derechos de padre y en caso de que éste encuentre inconvenientes en pagar la cuota alimentaria, propone que lo haga el Estado. El bejaço fue la forma de decir que importa muy poco que el Papa sea latinoamericano y austero. Poco está influyendo e influirá eso en el conservadurismo con el que la Iglesia oprime a la comunidad lbgt y a las mujeres. La Iglesia Católica es responsable del recrudecimiento de homofobia que está viviendo Brasil.

Luego del encuentro con la juventud católica, la horda envuelta en colores continuó hacia el Palacio. Allí se unió a unos mil quinientos indignados que también se habían citado ese día frente a la sede del gobierno de Río, durante la reunión entre Dilma y Francisco. La convocatoria invitaba a manifestarse en contra “del gasto público de 180 millones de reales” que le está costando a Brasil la visita. Y también contra el gobernador de Río, Sergio Cabral, así como “contra la violencia desmedida de la policía en las protestas”, que respondió, fiel a su estilo, con balas de goma. Hubo heridos y detenidos, entre ellos tres de los Midia Ninja, jóvenes que transmiten por streaming las protestas brasileñas desde junio y hacen circular información alternativa en Internet. Algunos de los videos de lo que pasó esa noche, tiros incluidos, puede verse en Facebook: NINJA.

Compartir: 

Twitter

 
SOY
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.