Amo, desde muy temprano en mi vida, a los animales, motivado además por una familia que me acompañó siempre en este destino. Así recuerdo desde niño mi casa llena de sonidos perrunos, gatunos y de jilgueros roncos y otros armoniosos, tortugas mudas, cotorras en los hombros pellizcándome las orejas y toda paloma pichona caída de sus nidos cuidada hasta su propio primer vuelo. Tanto es este amor, que desconozco la vida diaria sin la compañía de mis mascotas, siempre han estado presentes. Hoy, actualmente, me acompañan Amada Luna y Divina Vida (hermanitas felinas adoptadas), Roque Montalbán y Bella India. En esta bellísima imagen estamos los tres, y no es casualidad: Bella India y mi adorada Virgen Vikinga, que me acompañó durante 20 años, y partió recientemente envuelta de fiel amor, y en una paz única. Esta sección, Familia Animal, se convierte en nuestro homenaje hacia ella, que día a día me recibió con sus charlas por toda la casa. En su vejez comprendía su necesidad de mayores cuidados y así lo hice hasta el final. Ella y Bella son las más antiguas de la casa, ellas fueron compañeras de muchas historias compartidas, y aquí posan en su buen derecho de considerarse mis amigas perfectas.

Vikinga ahora descansa en un hermoso macetón, donde he plantado un ficus junto a una Santa Rita; la saludo todas las mañanas y sé que continúa habitando esta casa.

Pero ¡ojo! no se crean que sólo vivo para mis amigas gatunas y perrunas, ¡también tengo chivos!: acabo de estrenar Muñeca, en el Centro Cultural de la Cooperación, con dirección de Pompeyo Audivert. Continúo con las exitosas funciones de Improvisación Mosquito, participo del programa En mi propia casa por Radio Nacional, doy clases de impro, hago activismo 100% diversidad, creé ese gran monstruo que es Destravarte. Y cada tanto me queda algo de tiempo para comer y dormir.