"Es aberrante lo que pasa en Quilmes"

El secretario general de ATE-Quilmes, Claudio Arévalo, reclamó la reincorporación de los empleados despedidos en esa municipalidad del sur del conurbano bonaerense, al considerar que se trata "de compañeros que venían todos los días a trabajar" y resaltó que se trata de "compañeros que prestan servicio en el Hospital de San Francisco Solano, las guarderías municipales, las unidades sanitarias y también hay barrenderos".

El dirigente estatal consideró que "lo que hay que ajustar son los cargos políticos, porque tenemos una enfermera que hace 8 horas y gana 4500 pesos" y recordó que el sueldo del intendente es de 112 mil pesos por mes más un 50 por ciento por gastos de representación.

"Tenemos una sola enfermera para atender 12 pacientes, por lo que en realidad lo que necesitamos es más nombramientos, no vemos que sobre personal", sostuvo.

Para Arévalo, el intendente Martianiano Molina "se equivocó, porque echó trabajadores y por eso espero que reflexione para que los compañeros vuelvan a tener su fuente de trabajo".

En ese sentido, el titular de la filial de ATE comentó que si bien el gremio aún no fue recibido por el intendente se produjo una reunión en las últimas horas con el secretario de Gobierno, quien les prometió "revisar caso por caso. Pero eso no alcanza, exigimos las reincorporaciones en forma inmediata".

"La verdad que es aberrante lo que pasa en Quilmes", afirmó Arévalo en una entrevista por Radio Delta.

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