Por un aumento presupuestario y salarial, por la democratización universitaria, anoche marcharon estudiantes, docentes y trabajadores de universidades nacionales. Fueron varios miles de personas: una gruesa columna de tres cuadras que llevó sus reclamos hasta el Ministerio de Educación y el rectorado de la Universidad de Buenos Aires. Es que, después de la batahola producida el martes pasado al frustrarse por cuarta vez la elección del rector de la UBA, el contenido central de la protesta viró hacia el repudio a la violencia sufrida por los estudiantes y el rechazo a la candidatura de Atilio Alterini, quien cosecha mayores apoyos para acceder al cargo.

“El facho no va a entrar, el facho no va a entrar”, fue uno de los hits de la noche, seguido de cerca por “me parece que el facho no sale rector, se viene la democratización”. Además del actual decano de Derecho, los que más dedicatorias de cantitos e insultos detentaron fueron “la patota de Apuba” (el gremio no docente cuyos miembros se trenzaron con alumnos), el gobierno nacional y la Franja Morada.

La marcha universitaria había sido convocada por los gremios Conadu y Conadu Histórica junto a la federación estudiantil de Buenos Aires (FUBA) para exigirle al Gobierno la triplicación del presupuesto de la educación superior y una ampliación de la democracia en las formas de gobierno académico. El pedido de incremento salarial se reiteró en el marco de una negociación en marcha: esta semana, Educación les propuso a los docentes un aumento del 19 por ciento, que se aplicaría en dos tandas (junio y agosto).

Anoche, los universitarios contaron con apoyo de diversas organizaciones sociales y sindicales. Hebe de Bonafini y otras Madres de Plaza de Mayo, grupos de HIJOS y también Raúl Castells participaron de la manifestación que comenzó a las 18, en Plaza Houssay, frente a la Facultad de Ciencias Económicas, donde hubo incidentes (ver aparte). Banderas y carteles identificaban a docentes de Salta, Cuyo, Comahue, La Plata, Tucumán, Rosario, de la UBA (AGD) y otras universidades, a centros de estudiantes de varias facultades y a numerosas agrupaciones de izquierda e independientes: PTS, MST, PO, MAS, CEPA, NBI, Vallese, Libres del Sur. Estas últimas –de perfil nacional y popular– marcharon junto a la izquierda pese a sus diferencias respecto del Gobierno “para privilegiar el repudio a la candidatura de Alterini”, que es cuestionado por haber sido juez y funcionario porteño bajo la última dictadura.

Pasadas las 19, encabezada por un camión que llevaba el equipo de sonido y luego oficiaría de escenario, la marcha comenzó a recorrer la avenida Córdoba, luego dobló a la izquierda por Callao y bordeó la plaza hasta desembocar frente al Palacio Pizzurno. “Ni un genocida, ni un procesista, ¡democracia para la universidad pública!”, abrió su discurso José Luis Molina, dirigente de la Conadu Histórica. “Hace muchos años que venimos denunciando lo que hoy se hace patético en la UBA, la presencia de las camarillas rectorales... Mientras esta universidad pública no sea democrática, no esté al servicio de la sociedad y no contenga a las mayorías, seguiremos en la calle.”

Antes de que subieran a hablar los dirigentes estudiantiles y la columna se dirigiera por Viamonte hasta el rectorado, se pronunció un representante del personal de la UBA, pero de una línea opositora a la que conduce el gremio. “Repudiamos la barbarie de la patota no docente ejercida contra los estudiantes y exigimos la expulsión del sindicato de los agresores identificados”, dijo Marcos Britos.

“Venimos a denunciar al Gobierno, que dejó una zona liberada en Plaza Houssay mientras el gremio Apuba, que dirige el kirchnerista Jorge Anró, golpeaba a los estudiantes para garantizar la elección de un shuberoffista como rector”, se despachó Santiago Gima (PO), dirigente de la FUBA. “La única salida a la crisis de la UBA es la inmediata reforma del estatuto para unificar el claustro docente, aumentar la representación estudiantil e incorporar a los no docentes en el cogobierno”, planteó a su turno Martín Bustamante (CEPA), consejero alumno. Y el remate estuvo a cargo de Agustín Vanella (MST), también de la FUBA: “Alterini, te vamos a exigir no sólo que renuncies a tu candidatura, sino también que renuncies como decano de Derecho”.