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Contratapa|Lunes, 19 de julio de 2010
Arte de ultimar

Hay dos tipos

Por Juan Sasturain
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“Hay dos tipos de mujeres: las que te lo cobran
y las que te lo hacen pagar.”
Juan A. de Blas

“Hay dos tipos de boludos: los que prestan los libros y los que los devuelven.”
Popular

–Hay dos tipos.

–Hay dos tipos de gente: los incontables y los que cuentan.

–Soy de los que cuentan.

–Hay dos maneras de contar: hacer cuentas y contar cuentos.

–Cuénteme.

–Están los que viven para contarlo y los que cuentan para vivir.

–Haga de cuenta.

–Hay dos tipos de gente que cuenta: los que dicen ay y los que dicen me duele.

–Yo soy de los que dicen me duele.

–Ay.

–Lo siento.

–Hay dos tipo de gente: los que sienten y los que dicen lo siento.

–Algo hay que decir.

–Hay dos tipos de escritores: los que tienen algo que decir y los que tienen algo que escribir.

–Si uno tiene algo que decir, que lo diga. Que escriba lo que tenga que escribir, no lo que quiera decir.

–No.

–No qué.

–No necesariamente.

–Hay dos tipos de necesidades: lo que alguien necesita y lo que es necesario. Que alguien necesite escribir no significa que sea necesario que escriba.

–Rilke dijo que sólo se debía escribir si no se podía vivir sin hacerlo.

–Hay dos tipos de poetas: los que creen en la poesía y los que se la creen.

–Como los actores: los que se la creen y los que te la hacen creer.

–Hay dos tipos de creyentes: los que tienen fe y los que creen tener fe (creen en lo que tienen).

–O no.

–O no qué.

–Hay dos tipos de o: para la equivalencia (xeneizes o bosteros) o para la disyunción (directo o diferido).

–Hay dos tipos de gente: las que viven en directo y las que viven en diferido.

–Los hijos se hacen en directo y se tienen en diferido.

–Un adoptado se tiene en directo.

–Un chico de probeta se hace en diferido.

–Hay dos modos de diferir: postergar y diferenciarse.

–Soy diferente porque soy distinto.

–Soy diferidor porque pospongo.

–Hay dos maneras de posponer: hasta ponerla algún día y no ponerla nunca.

–Hay dos tipos de nunca: nunca jamás y jamás nunca.

–O casi.

–Casi qué.

–Casi nunca.

–Hay dos tipos de casi: apenas y a gatas.

–Hay dos tipos de gatas: flora y fauna.

–A la gata flora nada le viene bien, a la gata fauna todo le cabe.

–Hay dos maneras de caber: justo y holgado.

–Hay hombres justos y hay hombres holgados.

–A los justos, apenas les alcanza; a los holgados, les sobra.

–Dependen del talle y la talla.

–Hay holgados de talle grande que no dan la talla justa y viceversa.

–Hay justos vaciados en bronce y holgados llenos de oro y viceversa.

–No es justo.

–No qué.

–Viceversa.

–No hay dos tipos de viceversa: es una clase, un tipo de dos.

–Hay dos tipos de dos: el segundo y el doble.

–Hay dos tipos de dobles: el mismo otra vez y otro que es dos veces el mismo, el par.

–Hay dos tipos de pares: el par completo y al que le falta el par.

–A mí me falta un par.

–De jugadores.

–Hay dos tipos de jugadores: los que juegan y los que se juegan.

–Los soñadores.

–Hay dos tipos de sueños: el que te duerme y el que no te deja dormir.

–Hay quien les lee a los chicos para que se duerman y sueñen, y hay quien lee, sueña como un chico y se despierta para siempre.

–Hay dos tipos de lectores: los que abandonan y los que llegan hasta el final.

–Hay dos tipos de finales.

–Uno.

–Dos.

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