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La racha positiva de David Nalbandian, de once victorias consecutivas desde su regreso a los courts tras la operación de cadera y las molestias en los aductores que entorpecieron su retorno, se frenó ayer con la derrota del cordobés en los cuartos de final del Masters 1000 de Toronto ante el número cuatro del ranking, el escocés Andy Murray, quien con un tenis de excelencia lo derrotó por un contundente 6-2 y 6-2. Ahora, Nalbandian apostará sus fichas al Masters 1000 de Cincinnati, donde buscará seguir escalando posiciones en el ranking y así ingresar como cabeza de serie al US Open, el último Grand Slam de la temporada.
Apenas 69 minutos duró el sufrimiento de Nalbandian (número 45 del ranking) frente a Murray. Es que el escocés jugó en un gran nivel y pese a que el cordobés intentó imponer su juego, se quedó sin respuestas ante la contundencia del número cuatro del mundo. Con la eliminación también se cortó la mejor racha positiva en la carrera del cordobés, que con el triunfo del jueves ante el sueco Robin Soderling había alcanzado los once encuentros (dos por la Copa Davis, seis en el ATP de Washington y tres en el Masters 1000 de Toronto).
En esa cantidad de victorias, de las cuales nueve las logró en tan sólo once días, el cordobés derrotó, además de a Soderling, a otros tenistas de gran jerarquía como son los rusos Nikolai Davydenko (6º) y Mikhail Youzhny (14º), el croata Marin Cilic (13º) y el español David Ferrer (12º). Pero lo más importante: logró sumar en Washington, tras 19 meses de sequía, el 11º título de su carrera al vencer en la final al chipriota Marcos Bagdhatis por 6-2, 7-6 (4).
Con lo cosechado en Toronto, Nalbandian va a sumar 180 puntos a los 965 que ya tiene, con lo que podría escalar algunas posiciones más en el ranking y aparecer la semana próxima entre el lugar 35º y 37º del escalafón. El próximo paso del cordobés será su participación en el Masters 1000 de Cincinnati (que se jugará la semana próxima) y luego el US Open, que en la edición 2009 obtuvo el tandilense Juan Martín Del Potro al vencer en la final al entonces número uno del mundo, el suizo Roger Federer.
En el partido de ayer, Murray fue implacable frente a Nalbandian, quien no pudo mantenerle el ritmo. El escocés lo quebró en los momentos justos, en el tercero y séptimo juego de la primera manga, un set en el que el cordobés cometió 14 errores no forzados contra sólo cinco de su rival. El segundo set fue igual de contundente. Nalbandian cedió su servicio en el primer juego, con dos dobles faltas estuvo a tiro de ceder el quinto juego, pero se recuperó y terminó cayendo otra vez en el séptimo. Murray disponía de dos pelotas para ganar el partido, pero en la primera, con un ace, liquidó el pleito. Nalbandian se despidió de Toronto redondeando 30 errores no forzados, y apenas unas pocas jugadas con su sello magistral.
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