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David Nalbandian tendrá la chance de reeditar un viejo clásico en la tercera ronda de Wimbledon, aunque menos común en los últimos años. Tras derrotar en cuatro sets al austríaco Andreas Haider-Maurer, el cordobés se cruzará en esa instancia con el suizo Roger Federer, en un duelo que viene desde la etapa de juveniles y que se ha repetido 18 veces como profesionales. Sin embargo, desde 2008 que no se volvieron a ver las caras.
Tras dos horas y 37 minutos, Nalbandian se pudo sacar de encima a Haider-Maurer, al que derrotó 6-3, 3-6, 6-4, 6-4, aunque sin desplegar un buen juego. La diferencia de jerarquía entre ambos jugadores quedó expuesta en los momentos importantes de cada set, donde Nalbandian marcó la pequeña diferencia que le permitió quedarse con el partido. “Lo más importante fue haber ganado”, señaló el cordobés. “Fue otro día muy difícil de jugar, con mucho viento. Tuve muchas oportunidades para romper, pero no lo pude concretar. El segundo set no lo jugué muy bien, lo perdí y tuve que volver a empezar prácticamente de cero”, analizó Nalbandian, que figura en el puesto 28º del ranking mundial.
Gracias a esta victoria, el argentino se medirá por un lugar en los octavos de final con Federer, número tres del mundo, que busca este año su séptimo título en Wimbledon. El suizo no tuvo inconvenientes para superar 6-2, 6-3, 6-2 al francés Adrian Mannarino. “No será la primera vez, nos conocemos mucho, pero acá siempre es distinto, porque él ha ganado muchas veces y siempre es candidato. Tengo que creer en mi juego y animarme a atacar”, remarcó Nalbandian sobre su próximo enfrentamiento ante el ex número uno del mundo.
Hasta ahora, Federer y Nalbandian se enfrentaron en 18 ocasiones, con diez triunfos del suizo y ocho del argentino. La particularidad es que el argentino se había impuesto en los primeros cinco partidos. Luego, el suizo achicó la desventaja y dio vuelta la historia con diez triunfos en los últimos trece encuentros, entre ellos los últimos dos (Montecarlo y Basilea 2008). Nalbandian no le gana a Federer desde los Masters 1000 de París y Madrid 2007, cuando lo superó dos veces en semanas sucesivas. La de mañana será la primera vez que se crucen en Wimbledon, donde Federer celebró seis títulos y donde Nalbandian disputó la final en 2002.
“Hay que jugar, y tengo que pensar en mí. Me falta mucho para sentirme en mi mejor nivel y debo aprovechar todos los partidos. No hace falta que lo diga, pero Roger es un jugador muy completo”, afirmó Nalbandian, que recién regresó al circuito hace dos semanas, en el torneo de Queen’s, luego de haber superado un desgarro abdominal y una hernia. “Ganar a cualquiera de los de arriba aportaría mucha confianza. Eso es lo que uno intenta hacer, aunque no siempre es fácil, uno trata de hacerlo lo mejor posible”, resaltó el unquillense, que buscará dar el batacazo ante Federer.
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