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La crisis económica afectó de lleno al mercado invernal europeo de pases, impidiendo, por ejemplo, la salida de Carlos Tevez del Manchester City, con operaciones de escasa monta en cifras y prestigio. En España, los grandes no abrieron sus arcas, lo que avala la ausencia de grandes estrellas en el mercado de la media temporada.
El Sevilla fue el club que más invirtió para contratar jugadores sin mucho nombre, como José Antonio Reyes (ex Atlético de Madrid) o el senegalés Diawara. En total, unos 7,1 millones de euros (9,4 millones de dólares). Nada cercano a una cifra llamativa. El Zaragoza llegó a un acuerdo con el Catania para la cesión del ex Boca Pablo Sebastián Alvarez.
En Italia, los jugadores latinos alegraron las contrataciones, con Thiago Motta como estrella, con su traspaso del Inter al París Saint-Germain por 10 millones de euros (13,08 millones de dólares). El club francés, propiedad de un fondo qatarí, se reforzó también con los defensores brasileños, Maxwell, del Barcelona, y Alex, del Chelsea.
El Inter se hizo con los servicios del colombiano Fredy Guarín, otro ex Boca, del Oporto, que compartirá vestuario con el brasileño Nunes Jesus, de 20 años, del Internacional de Porto Alegre.
El Milan, que se mantuvo durante un tiempo a la caza de Tevez, finalmente terminó contratando a Maxi López (foto), el ex delantero de River que jugaba en el Catania. “Este es el equipo de mis sueños y haré lo máximo por quedarme en este club, con el que puedo llegar a ganar todo”, expresó el argentino, que llegó a préstamo por seis meses.
Al Catania pasó Juan Pablo Carrizo, el ex arquero de River, que no tenía lugar en la Lazio. El uruguayo Martín Cáceres (Sevilla) reforzará las filas del Juventus, mientras el delantero chileno Eduardo Vargas abandonó la U de Chile, campeón de la Copa Suda-mericana, para incorporarse al Napoli, donde jugará junto a Ezequiel Lavezzi y Edinson Cavani; el club napolitano desembolsó unos 11 millones de euros (14,3 millones de dólares).
La Roma obtuvo la cesión del brasileño Marquinho, del Fluminense, y perdió al chileno David Pizarro, quien, según su representante, jugará hasta final de temporada en el Manchester City, siendo más difícil todavía que Tevez pueda jugar en el conjunto inglés, lo que no hizo en los últimos cuatro meses. El City cayó ayer 1-0 con el Everton y fue alcanzado por el Manchester United, que venció 2-0 al Stoke City, en lo alto de la tabla de la Premier League.
La directiva del City pretendía recuperar buena parte de los casi 50 millones de libras (unos 59,5 millones de euros) que pagó por el delantero argentino en 2009 y no aceptó las ofertas que llegaron del Inter, el París Saint-Germain y el Milan. La oferta del Liverpool de pagar el salario semanal del jugador (unas 200.000 libras o 238.000 euros) y ahorrarse el pase tampoco prosperó. La perspectiva de Tevez es incierta quedándose en Manchester, una ciudad a la que este verano ya dijo que no querría volver “ni de vacaciones”.
En Alemania, el fichaje del senegalés Mame Biram Diouf (Manchester United) por el Hannover 96 fue lo más destacado. El Borussia Mönchengladbach cedió al delantero Raúl Bobadilla, que se formó en las inferiores de River, al Young Boys suizo.
En Francia, el Olympique de Marsella, muy acuciado por los problemas económicos, se deshizo del futbolista que más ganaba, el ex Huracán y River, Lucho González, que volvió al Porto, del que había llegado hacía dos temporadas. Había pagado 18 millones de euros y lo vendió ahora por dos, aunque se ahorra el elevado salario del jugador argentino. El Lille recibió al defensor argentino Mauro Cetto (Palermo).
El pase más caro en Inglaterra fue el del belga Kevin de Bruyne, del Genk, por el que el Chelsea pagará 6,7 millones de libras, casi 8 millones de euros.
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