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Deportes|Sábado, 5 de abril de 2014
DIEGO OSELLA EXPLICA LAS CLAVES DE ESTE COLON PUNTERO

“Armar un equipo incómodo”

El entrenador del conjunto santafesino entendió qué era lo que tenía que hacer con los jugadores para encarar la hazaña de mantener la categoría. “En estos dos meses salimos de un lugar complicado”, aclara el conductor.

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Osella potenció a los jugadores.

En los pocos meses que lleva trabajando el entrenador Diego Osella en Colón, el equipo santafesino pasó de estar en zona de descenso a ser el único puntero del torneo. “Cuando llegamos a Colón, sabíamos la situación en la que estaba el club, sabíamos lo difícil que iba a ser”, le contó ayer a Página/12 Osella, que dejó Patronato para reemplazar a Mario Sciacqua. En el torneo pasado, Colón terminó último, con sólo seis puntos. Sufrió la quita de seis unidades por parte de la FIFA por una deuda con el Atlante mexicano por el pase de Juan Carlos Falcón, mientras que la AFA le contabilizó como perdido un partido que no jugó frente a Rafaela, por la protesta del plantel ante la falta de pago de los sueldos. La crisis institucional de Colón dejó además un déficit millonario que le impidió incorporar jugadores en el último mercado de pases. Sólo sumó a Ezequiel Videla, de la Universidad de Chile, por la lesión de Maximiliano Caire, mientras que por las deudas, muchos jugadores importantes del plantel, como Lucas Mugni, Rubén Ramírez, Iván Moreno y Fabianesi o Bruno Urribarri, terminaron sus contratos y emigraron con el pase en su poder. Frente a esta situación, Osella conformó un equipo aguerrido y ordenado tácticamente, con muchos juveniles de las divisiones inferiores del club.

En la previa del encuentro del sorprendente Colón con el Lanús de Guillermo Barros Schelotto, Osella aseguró ayer en una charla con este diario que, a pesar de que Colón mantiene la punta después de la trabajosa victoria sobre All Boys, sólo piensa en dejar a su equipo en Primera al final del torneo. “Están muy bien ellos, eso habla del buen entrenador que es (Barros Schelotto)”, comentó Osella sobre el técnico del equipo granate, que lo recibirá con todos sus titulares para no quedar relegado en la lucha por el título, mientras también piensa en el choque de la semana que viene con O’Hi-ggins, por la Copa Libertadores.

“Estadísticamente, en los números, Colón estaba muy mal, y en estos dos meses salimos de un lugar complicado. Ganamos 13 de los 15 puntos que disputamos con rivales directos en la lucha por no descender. Esperemos, ahora que empiezan los enfrentamientos entre ellos, que pierdan algunos puntos que nos den ventaja”, resalta Osella.

–Pero hoy, Colón es puntero...

–Sí, pero esta situación es sólo una circunstancia que se dio gracias a una suma de buenos resultados en los primeros partidos. Nuestro objetivo es lograr la permanencia y tenemos que conservar el foco en eso. Después, también disfrutar un poco lo que podamos.

–¿Cómo hacen en el cuerpo técnico para que los jugadores mantengan el foco en el objetivo del equipo cuando van punteros?

–Es difícil. Cuando pasa un partido, los chicos quieren que el partido que sigue se juegue al día siguiente, por la ansiedad. También por el interés que varias instituciones tienen por ellos. Nosotros, desde que llegamos, les quisimos hacer entender que en estos cuatro meses, lo más importante de nuestras vidas son nuestras familias y Colón, nada más.

–¿Le favorecen a Colón las seguidillas de partidos en este calendario apretado?

–No es fácil jugar cada tres días, por el cansancio. La ansiedad la venimos manejando bien, pero lo que es difícil de manejar es el cansancio. Quizá podemos tener ventaja sobre los que juegan la Copa Libertadores, pero igualmente esta seguidilla de partidos no nos favorece.

–Después de la baja importante de jugadores y el estado anímico del plantel, ¿cómo armaron el equipo?

–Después de un rápido reconocimiento del plantel, entendimos que teníamos que armar un equipo incómodo, sobre todo por cómo le había ido a Colón en el torneo anterior. Colón había propuesto en ese torneo mucho más de lo que propone ahora, pero se quedaba con las manos vacías. Así que armamos un equipo aguerrido, incómodo, haciendo hincapié en el orden. Nuestro equipo presiona y sale rápido de contragolpe. Jugando así, tratamos de aprovechar los espacios que nos deja el rival, no tenemos un juego basado en la tenencia de la pelota. Pero tampoco elegimos el rival, por eso tenemos que jugar partido a partido. Esperamos una buena ejecución del plan que tenemos para vencer a Lanús.

Entrevista: Santiago Uberti.

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