Con el sello de satisfacción garantizada

Los futbolistas argentinos han marcado historia en diferentes ligas del mundo, y en 2014 no fue la excepción. Pero este año, los entrenadores han tomado un enorme protagonismo, tanto a nivel clubes como con las selecciones, y tanto en Europa como en América. Títulos, actuaciones inolvidables y legados perdurables más allá de los resultados marcaron la agenda de los directores técnicos argentinos.

El logro más relevante para un entrenador argentino en el exterior lo consiguió Diego Simeone, campeón de la Liga de España con el Atlético Madrid, postergando al Barcelona –de Gerardo Martino– y al Real Madrid. Sin embargo, no fue el único. En Francia, Marcelo Bielsa revolucionó Marsella al colocar al Olympique como líder del certamen tras la primera rueda, con casi el mismo equipo que había finalizado octavo en el torneo anterior.

Y a nivel selecciones, los conductores nacionales también dieron la nota en el Mundial de Brasil. Al subcampeonato de Alejandro Sabella con la Selección Argentina se le sumaron José Pekerman, que arribó con Colombia a los cuartos de final, y Jorge Sampaoli, que llegó con Chile a los octavos de final. En ambos casos, el local Brasil se interpuso en las meritorias campañas de los técnicos argentinos, que seguirán en sus cargos para la Copa América del año que viene. Y allí tendrán más colegas compatriotas, ya que Ramón Díaz arregló su vinculación con Paraguay y Néstor Clausen fue designado como DT interino de Bolivia.

Claro que los resultados más llamativos llegaron en los torneos sudamericanos, con un fin de año plagado de festejos: cuatro de los campeones de las nueve ligas del continente tuvieron entrenadores argentinos. Cinco de diez si se toma a Diego Cocca con Racing en el torneo local. Y a ellos se les puede sumar el logro de Pablo Guede en Chile, que logró clasificar al modesto Palestino a la Copa Libertadores 2015 tras ganar la Liguilla.

La lista de argentinos campeones la encabeza Gustavo Costas (ver aparte), que la semana pasada obtuvo el título del Torneo Finalización de Colombia con el Independiente Santa Fe de Bogotá. Gracias a un triunfo 2-1 como visitante en el Atanasio Girardot y a un empate 1-1 como local en El Campín, el Santa Fe de Costas dejó en el camino al Independiente Medellín para festejar el título.

Casi en simultáneo, Daniel Ahmed festejó su título en el Torneo Descentralizado de Perú con el Sporting Cristal. Criticado por un mal comienzo, el ex delantero de San Lorenzo revirtió la imagen en el Torneo Clausura y celebró el campeonato tras derrotar en el tercer partido de la final a Juan Aurich, luego de sendos empates 2-2 y 0-0. El 3-2 en tiempo suplementario en el encuentro decisivo significó el título nacional para el conjunto de Ahmed.

Al mismo tiempo que sus colegas, en Ecuador el que festejó fue Gustavo Quinteros, ex zaguero de Argentinos y San Lorenzo. En una final entre los históricos rivales de Guayaquil, el Emelec de Quinteros se impuso 3-0 sobre Barcelona en el Clásico del Astillero y se quedó con el título, el segundo consecutivo bajo su conducción. En el encuentro de ida habían empatado 1-1.

En Venezuela, la gran celebración fue para Horacio Matuszyczk, ex delantero de Boca y Racing, entre otros, que condujo a Trujillanos al título del Torneo Apertura. El 14 de diciembre, gracias a un triunfo 3-0 sobre Deportivo Petare en la última fecha, el equipo del Polaco pudo dar la vuelta olímpica, gracias al punto de ventaja que logró sobre Deportivo La Guaira en la jornada anterior.

No fue un título, pero para Pablo Guede resultó algo equivalente. El ex entrenador de Nueva Chicago, con el que consiguió ascender de la B Metropolitana a la B Nacional en mayo pasado, guió a Palestino a la Copa Libertadores, certamen al que se clasificó luego de 36 años tras golear 6-1 a Santiago Wanderers. Eso sí, el entrenador que compartió el curso de técnico con Tito Vilanova y que se perfeccionó bajo el ala de Pep Guardiola no quiere que hablen de Palestino como el Barça de La Cisterna...

Fuera de Sudamérica, otro argentino campeón fue Antonio Mohamed. Mientras su Huracán obtenía el ascenso a la máxima categoría, su América obtenía el título del Apertura mexicano. A pesar de perder 1-0 en el encuentro de ida, Las Aguilas de Mohamed se impusieron 3-0 a Tigres y dieron la vuelta olímpica. Un día después, el Turco dejaba su cargo y sería reemplazado por el uruguayo Gustavo Matosas.

Otros nombres menos conocidos también tuvieron su sello en el continente. En Honduras, Diego Martín Vázquez condujo al Motagua al título en el Torneo Apertura, luego de vencer 2-1 a Real Sociedad en la final. El equipo del ex arquero mendocino, que tuvo un paso fugaz por River y Huracán, había dejado en el camino en las semifinales al Olimpia, de su compatriota Héctor Vargas, ex jugador de Estudiantes y Temperley. Distinta fue la suerte para Daniel Messina en El Salvador, que se quedó en la puerta del título con el Aguila. El conjunto del ex jugador de River y Huracán y de larga trayectoria en el ascenso argentino perdió la final por penales ante el Isidro Metapán.

Está claro que el fútbol argentino sigue siendo de exportación, y no sólo de jugadores. También exporta entrenadores que, a la vista de los resultados, podrían salir con el sello de satisfacción garantizada.

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