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Todavía continúan las secuelas del desarrollo y el resultado de lo sucedido, con algunos de los partidos de la tercera fecha del torneo de las Seis Naciones de rugby. Hay quienes se asombran del triunfo de Gales sobre Francia en París, dados los últimos desempeños de los dos seleccionados, pero lo realmente sorprendente fue la victoria de Italia sobre Escocia, en el legendario Murrayfield de Edimburgo.

La tozudez del pack de forwards italiano, en especial en los últimos minutos del partido, dio sus frutos cuando ya no quedaba tiempo y el referí irlandés George Clancy hizo lo que corresponde, y lo que prácticamente ninguno de sus colegas cobra: try penal en favor de los visitantes, y cuando ya se habían jugado 80 minutos.

Es que pareciera que en las últimas décadas los árbitros de rugby olvidaron algunos capítulos del reglamento. Por ejemplo, no sancionan la pelota torcida en el scrum.

Pero uno no recuerda muchas infracciones cobradas con try penal. Y Clancy tuvo las pelotas bien puestas para cobrar la infracción, sobre la hora y en favor de los visitantes.

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Las pelotas bien puestas