Página/12 :: Deportes :: Un clásico que ya se está jugando en los micrófonos

El clásico del domingo entre Independiente y Boca, que puede significar la consagración del equipo de Alfio Basile como bicampeón del fútbol argentino, va tomando temperatura al calor de las declaraciones cruzadas. El capitán de Boca, Hugo Ibarra, le respondió duramente al presidente de Independiente, Julio Comparada, que atribuyó el rendimiento del puntero al accionar de los árbitros, al asegurar: “Boca gana porque juega mejor que el rival y mete la pelotita en el arco”. Para el lateral, las afirmaciones del dirigente “son excusas. Si su equipo no anda bien, tiene que fijarse en los problemas internos y no mirar lo que hace el vecino. Entre los dos torneos, lo de Boca ha sido impresionante por la cantidad de puntos que sumó. Así que no deberían poner excusas tontas”.

En Independiente tampoco ahorran coraje. “Este es un clásico y hay que jugarlo, como dice el Cholo (Diego Simeone), con el cuchillo entre los dientes. En cada jugada, en cada rebote, en cada pelota dividida, debemos tratar de imponernos”, opinó el técnico Julio Falcioni. “A Boca se le juega con mucha actitud y predisposición, tratando de no dejar jugar a los grandes jugadores que tiene, contrarrestándolo con fútbol. Nuestros jugadores deben estar atentos a los once de Boca porque todos juegan bien.”

Guillermo Barros Schelotto, que ayer cumplió 33 años y lo celebró en el entrenamiento, afirmó: “Me gustaría hacerle un gol a Independiente y que Boca sea campeón, aunque suene medio egoísta”.

Los jugadores de Independiente no sólo intentarán evitar que les marquen goles: también que el rival consiga su lauro. “Siempre es molesto que te den vueltas en la cara. Pero nosotros estamos pensando en sumar y no en arruinarle la fiesta a Boca”, argumentó el veterano defensor Fernando Cáceres. “Obviamente, seremos felices si conseguimos retrasar el festejo del campeonato”, dijo el ex jugador de River y Boca. “Es una motivación extra que Boca llegue peleando el campeonato. Si te plantás enfrente del que puede ser el campeón es muy importante, y en lo anímico influye. La intención es tratar de que no puedan explotar su juego y definir el partido cuando tengamos la posibilidad de hacerlo.”

El partido se juega en el estadio de Independiente a las 16. En cambio, ayer se modificó, por segunda vez, el horario del clásico River-Racing, que se jugará, si no hay más cambios, a las 14. Ya había sido programado a las 11 y a las 13.

Un clásico que ya se está jugando en los micrófonos

Los planteles de Boca e Independiente se cruzan mensajes antes del partido del domingo. “Boca gana porque mete la pelotita en el arco”, gritó Ibarra. “Hay que imponerse en cada jugada”, opinó Falcioni.