“En una final de la Copa Libertadores hay que poner, meter y también tener un poco de suerte.” La receta para la victoria de anoche la dio Carlos Tevez, una de las figuras de Boca ante el Santos. El jugador pronosticó un partido “muy difícil” en el estadio Morumbí, la próxima semana, y pidió entender que “en las finales no siempre se puede jugar bien”.
Así como en la cancha para desairar a los jugadores del Santos, Tevez puso el freno a la hora de pensar en la revancha. “Ojo, que faltan 90 minutos para pensar en el festejo –aclaró–, y así como nosotros hicimos dos goles esta noche, ellos pueden hacerlos la semana que viene y empatar.”
De todas formas, el volante imaginó un escenario favorable, intuyendo que el Santos “saldrá a atacar desde el principio, por lo que se van a descuidar en el fondo y seguramente nos van a dar una chance”.
Para el capitán, Diego Cagna, el 2-0 conseguido anoche en la Bombonera “no alcanza para sentirnos seguros”. El volante, que fue reemplazado, opinó que Boca tiene que hacer un planteo similar al de la semifinal. “Hay que ir a San Pablo como fuimos a Colombia –señaló–, pero está claro que la victoria es un gran paso para conquistar la Libertadores.”
Cagna analizó al rival: “El Santos es un buen equipo, indudablemente. Pero creo que, a lo largo de los 90 minutos, nosotros fuimos mejores” apuntó el mediocampista, que entendió que el planteo táctico de Boca desembocó en el trámite del partido que se produjo. “Como salimos con tres delanteros, perdimos gente en el medio, y un poco por eso no controlamos tanto la pelota”, explicó. “Pero el resultado final prueba que hicimos un buen planteo”, señaló Cagna. “Me gustó la actitud y la concentración con las que jugamos”, dijo, finalmente.
Hubo unos 1500 hinchas del Santos en la Bombonera pero, para la revancha en el Morumbí, Boca recibió unas 3800 localidades, de las cuales pondrá 2800 a la venta sólo para socios, y el resto les será ofrecido a las 180 peñas del club que existen en el interior.
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