La Cámara Argentina de la Construcción presentará el próximo martes, durante el aniversario de la entidad, un plan para reactivar la obra pública, estructurado en tres etapas: la emergencia, el mediano plazo y el objetivo estratégico. Eduardo Baglietto, titular de la CAC, dijo que la reactivación del sector se lograría “vía algún tipo de blanqueo de capitales, que suplantaría la falta de crédito externo y facilitaría el ingreso de capital genuino”, explicó.
“Presentaremos cómo reactivar la obra pública hoy totalmente detenida. Para ello hablamos de tres etapas: la de la emergencia, que es hoy, donde deben tomarse una serie de medidas, fundamentalmente presupuestarias, como el pago de deudas.” Explicó que ese pago permitirá “poner en marcha la obra pública y recomponer capital de trabajo para las pymes de las construcción”. “En una segunda etapa –apuntó– la Argentina tiene que hacer un plan que sea posible. El país está en défault y sin pagar la deuda externa, sus intereses, y sin crédito externo. Entonces hay que disponer de dinero local a través de fondos fiduciarios viales e hídricos”, detalló.
Resaltó la necesidad de que “se utilice adecuadamente el presupuesto sin desviar las partidas hacia otras asignaciones no productivas, sino que se lo destine a la inversión y a la construcción”. Instó a que “se utilicen los fondos del Fonavi y no se permita que ese dinero se dirija a otros rubros que no sean la construcción de viviendas”. También propuso “usar las fondos de las AFJP que están dispuestas a invertir en desarrollos inmobiliarios”. Sobre el blanqueo, Baglietto dijo que “trataremos de recuperar parte del capital argentino en el exterior no declarado, vía algún tipo de blanqueo que ayude a falta de crédito externo”.