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Economía|Jueves, 17 de febrero de 2011
Comercio Interior les abrió un sumario a Finsoport y Ecolatina

Consultoras en la picota

La Secretaría sospecha que ambas firmas incurrieron en una violación a la Ley de Lealtad Comercial al difundir los índices de precios que elaboran. Los acusados sostienen que “nada habilita a la Secretaría a intervenir” en sus actividades.

Por Fernando Krakowiak
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Las consultoras ganaron protagonismo a raíz de la escasa credibilidad del índice de precios oficial.

La Secretaría de Comercio Interior informó ayer que les abrió un sumario administrativo a las consultoras Finsoport y Ecolatina porque sospecha que violaron la Ley de Lealtad Comercial al difundir los índices de precios que elaboran. Estas empresas tienen 10 días para presentar su descargo y si las explicaciones no convencen serán sancionadas con una multa que podría oscilar entre 100 y 500 mil pesos. Al ser consultado por Página/12, Jorge Todesca, titular de Finsoport, rechazó la acusación y afirmó que “no hay ningún artículo en la Ley de Lealtad Comercial que habilite a la secretaría a intervenir en nuestras actividades”.

A raíz de una denuncia presentada por la Cámara de Operadores Mayoristas Frutihortícolas del Mercado Central (Comafru), el 1º de febrero la dirección de Lealtad Comercial le envió a una docena de consultoras un cuestionario con 19 preguntas donde requería información sobre la metodología utilizada para la elaboración de sus índices de precios, las ponderaciones otorgadas a cada rubro, los centros de venta donde se realizan los relevamientos, los productos que monitorean y la forma en que proceden cuando los bienes exhiben una marcada variación de precios por motivos estacionales, entre otras consultas.

La requisitoria estuvo motivada por la sospecha sobre la representatividad de las muestras y la rigurosidad con que realizan los relevamientos de precios, pues esas supuestas falencias llevarían a las consultoras a manifestar inexactitudes en sus informes, los cuales luego inducen a errores y/o confusiones de sus clientes y de la población en general. El problema surgió porque en los últimos años las consultoras ganaron protagonismo a raíz de la escasa credibilidad del índice de precios oficial y muchas veces los números que difunden, mucho más elevados que los del Indec, son presentados como “la inflación real”.

Finsoport hizo un planteo de nulidad sobre lo actuado por Comercio Interior y se negó a suministrar los datos que le pidieron. “La secretaría no nos imputa nada. Sólo cita una denuncia de Comafru donde dice que brindamos información tendenciosa, pero el denunciante no presenta ninguna prueba”, afirmó Todesca a este diario. El ex viceministro de Economía de Eduardo Duhalde dijo que se enteró por un cable de la agencia Télam que le adjudicaban una violación al artículo 9 de la Ley de Lealtad Comercial. Ese artículo afirma que “queda prohibida la realización de cualquier clase de presentación, de publicidad o propaganda que mediante inexactitudes u ocultamiento pueda inducir a error, engaño o confusión respecto a las características (...) de bienes muebles, inmuebles o servicios”. “Es un artículo que forma parte del capítulo ‘Publicidad y promoción mediante premios’, pero nosotros no vendemos los informes al público, son contratos privados y lo único que hacemos es decir cuánto variaron los precios de un mes a otro haciendo valer nuestro derecho a la libertad de expresión”, agregó Todesca.

Otras consultoras, en cambio, respondieron a la requisitoria oficial y desde la secretaría que conduce Guillermo Moreno se dejó trascender ayer que la información suministrada sobre la elaboración de índices de precios al consumidor muestra que no tienen definiciones ni metodología claras. Una de las consultoras indicó que sus instrumentos de medición son “un software de cálculo y una base de datos”, como única respuesta técnico-metodológica al cuestionario entregado y otras cuatro consultoras respondieron que ellas no elaboran índices de precios sino que “solamente dan su opinión o funcionan como un observatorio”.

Durante la mañana de ayer, los economistas Daniel Artana (FIEL) y Carlos Melconian (C&M) también cuestionaron la iniciativa de Guillermo Moreno. Melconian afirmó que “no hay ninguna tergiversación, mala leche ni posibilidad de hacer daño con la información que difunden las consultoras”. Sin embargo, en abril del año pasado el economista Nicolás Salvatore, uno de los responsables de la consultora Buenos Aires City, publicó en su Facebook que “la inflación es un fuego santo purificador, que incendiará a todo el kirchnerismo en la hoguera. Brindo por Phi!! (inflación esperada) Y no sólo brindo, me voy a encargar, como todos los meses, de que Phi esperado sea alto, recontra alto, como diría el finado Guido Di Tella”.

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