Página/12 :: Economía :: Donaciones bajo sospecha

La AFIP allanó ayer doce oficinas de la empresa chilena Cencosud, por presuntas irregularidades en la venta de mercaderías enviadas desde Argentina al país trasandino como donaciones para las víctimas del terremoto ocurrido en febrero de 2010. Según la denuncia de la entidad que conduce Ricardo Echegaray, la compañía habría vendido la mercadería en sus locales, en vez de entregarla a los damnificados. El gobierno de Sebastián Piñera tomó contacto con Cencosud el 27 de febrero de 2010 para solicitar la provisión de artículos de primera necesidad para los damnificados, los cuales serían adquiridas por la Oficina Nacional de Emergencia Chilena. Y esta dependencia pública fue la que realizó el contacto con la Argentina. Si bien la denuncia fue efectuada hace 15 días en Mendoza, la investigación del fisco se inició hace más de un año, apenas comenzaron a enviarse los productos al país vecino. Como toda la operación estaba amparada bajo el concepto de “ayuda humanitaria”, la mercadería enviada a través de 180 camiones estuvo exenta del pago de impuestos. Sin embargo, a partir de la investigación, el ente fiscalizador calculó una evasión superior a los cuatro millones de pesos. Cencosud posee los supermercados Jumbo y Santa Isabel en Chile, Jumbo y Disco en Argentina, dos cadenas de supermercados en Brasil y la cadena de hogar Easy en Chile, Argentina y Colombia. Como dato anecdótico, el ministro de Minería, Laurence Golborne, fue directivo en la empresa. “La compañía actuó siempre de buena fe, siguiendo la petición realizada por el gobierno de Chile con el objetivo de ayudar a los más afectados por el terremoto”, indicó la empresa a través de un comunicado. “Por orden de un juez federal de Mendoza estamos llevando adelante un allanamiento en Cencosud, en sus oficinas de Suipacha y de Unicenter”, confirmó ayer Echegaray. El funcionario explicó que, “cuando sucedió el terremoto en Chile, se hizo un envío de productos como si fuera una donación y en realidad fue una operación comercial. No se pagaron derechos de importación, ni IVA, ni Impuesto a las Ganancias”, insistió.