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La cuenta corriente de la balanza de pagos finalizó el año pasado con un saldo casi neutro –apenas positivo en 17 millones de dólares– que se contrasta con el superávit de 2818 millones que registró al cierre de 2010, según informó ayer el Indec. El deterioro en el resultado se explica por un menor saldo comercial de bienes y servicios y una mayor erogación por rentas de la inversión. En el caso de las compras externas, el crecimiento “se explica por la mejora en el nivel de actividad”, detalla el informe. La diferencia entre las ventas y compras externas finalizó con una ganancia de 11.310 millones de dólares, mientras que en el año se estimó un pago al exterior en dividendos e intereses por 10.757 millones.

Luego del canje de deuda de 2005, el egreso neto por utilidades y dividendos (renta de la inversión directa) representa la mayor parte del déficit de la cuenta, equivalente al 68 por ciento, según el cierre de ejercicio de 2011. No obstante, el peso de la renta de inversión en relación con las exportaciones se mantiene en un rango históricamente bajo, 12,8 por ciento, cuando en los ’90 llegó a alcanzar el 32 por ciento. Por el lado de la cuenta financiera, el país registró el año pasado un egreso neto de 2267 millones de dólares, contra un ingreso de 2273 millones en igual período de 2010. El egreso respondió a salidas netas de divisas por 6332 millones de dólares del sector privado no financiero (empresas), compensadas parcialmente por ingresos del sector público y el Banco Central por 2466 millones, y del sector financiero por 1598 millones.

En este segmento, la deuda externa bruta total a fines de diciembre último ascendió a 139.715 millones de dólares. El coeficiente de deuda sobre PIB en dólares continuó en baja, tanto por la política de desendeudamiento como por el crecimiento de la actividad económica. Esta relación al tercer trimestre de 2011 –último dato de PIB en dólares publicado por la Dirección Nacional de Programación Macroeconómica del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas–, se ubica en un 32 por ciento.

LEVE SUPERAVIT EXTERNO

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