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“Hasta el momento el nivel de empleo registrado en las empresas privadas no resultó afectado por los cambios transitorios en la coyuntura económica”, según concluye el adelanto de la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) de mayo –con datos al 21 de abril pasado–, que difundió ayer el Ministerio de Trabajo. Según el informe, en marzo el empleo formal mantuvo una dinámica estable, “sin que se verificaran incrementos en las desvinculaciones de personal, ni en el volumen de despidos”. El cotejo respecto de marzo del año pasado arrojó una leve mejora de 0,5 por ciento. Esta semana el Indec informó que durante el primer trimestre la cantidad de obreros industriales ocupados sufrió una caída de 1,2 por ciento interanual, mientras que las horas trabajadas cayeron 0,3 por ciento. También se registraron suspensiones en algunas terminales automotrices, vinculadas al menor volumen de ventas a Brasil. “La suspensión es una dinámica habitual incorporada por la industria automotriz. Es coyuntural, no es una situación masiva, tal como lo demuestra la encuesta”, señaló a este diario el ministro de Trabajo, Carlos Tomada.
En conversación con Página/12, el ministro descartó que existan despidos masivos en alguna rama industrial. “No vemos esa situación durante el primer trimestre. Claramente hay menos despedidos y suspensiones que durante 2012, cuando se había disparado (la baja en el ritmo de creación de puestos de trabajo). Y aun así, esa situación pudo revertirse al año siguiente”, dijo Tomada. En diciembre de 2011 la creación de empleo fue en descenso; proceso que se extendió hasta septiembre del año siguiente. Desde entonces la evolución del nivel de empleos registrados se estabilizó con leve tendencia al alza.
De acuerdo con la información relevada por el EIL –sobre un universo de 2282 empresas privadas en ocho centros urbanos–, la cantidad de trabajadores “se mantuvo prácticamente constante, consolidándose la tendencia de sostenimiento del nivel de empleo formal de los primeros dos meses del año”, remarca el estudio. El documento detalla que en marzo se registró una expansión del empleo de 0,1 por ciento con respecto a febrero previo y asciende a 0,5 por ciento si se lo compara con igual mes del año anterior. “El leve crecimiento del empleo en marzo se produjo como resultado de un moderado incremento en la cantidad de incorporaciones de personal, que se refleja en la tasa de entrada (incorporaciones sobre total de empleo). Así revierte la tendencia descendente que se verificó a partir de noviembre de 2013”, afirma. La serie vuelve a posicionarse encima de la tasa de salida (desvinculaciones). En febrero, la última había sido mayor al ritmo de entrada.
–¿Se registraron mayores solicitudes de empresas al Programa de Recuperación Productiva (Repro) o al Procedimiento Preventivo de Crisis? –consultó Página/12.
–No hubo modificaciones en el tratamiento de estos instrumentos, salvo para casos puntuales con el Repro. Sigue bajo análisis de los ministerios intervinientes cualquier impacto en el nivel de empleo de la actual coyuntura económica. Pero no hay un hecho que llame la atención. Lo mismo sucede con el régimen preventivo de crisis. Lo cierto y lo concreto es que el nivel de empleo y la cantidad de trabajadores se mantuvo incluso con creación de puestos de trabajo.
La tasa de salida, según lo relevado por la cartera laboral, “se mantuvo prácticamente en el mismo nivel que el mes anterior, después de haber acompañado la caída de la tasa de entrada en los meses previos, con excepción de febrero, cuando presentó un leve crecimiento”. Las desvinculaciones de personal presentaron el mismo comportamiento que los despidos, las cuales mantuvieron el mismo nivel que en marzo pasado. En marzo el porcentaje de trabajadores despedidos en relación al empleo total alcanzó a 0,7 por ciento. “Este porcentaje es igual al verificado en 2013 e inferior al observado en 2012 (un uno por ciento)”, señala el EIL. El promedio de los tres meses del año también asciende al 0,7 por ciento, que implica menos de un trabajador despedido cada cien asalariados registrados en el sector privado.
El Indec informó para marzo una caída de 0,9 por ciento en el índice del salario industrial privado, aunque el trimestre acumula una suba de 21 por ciento interanual. En muchos casos, esta situación responde a que todavía existen actividades que no cerraron sus paritarias. “La negociación colectiva se está llevando a un ritmo adecuado, y ya hay casos testigo que cerraron sus acuerdos, no exentos de la habitual y normal conflictividad laboral”, concluyó Tomada.
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