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El acuerdo automotor con Brasil permitirá exportar 130 mil vehículos más durante el próximo año, adelantó la ministra de Industria, Débora Giorgi. Ese impulso, junto al impacto positivo sobre el consumo de las paritarias y de los programas de transferencia de ingreso como la Asignación Universal por Hijo, la nueva moratoria previsional, el plan Pro.Cre.Ar y el acuerdo con el Club de París “permitirá una recuperación económica en el segundo semestre”, sostuvo la funcionaria. Se manifestaron a favor del acuerdo representantes de las terminales, autopartistas y de Smata. Por el lado brasileño también se mostraron optimistas sobre los efectos de la medida, que además consolida el diálogo entre los dos países. La semana que viene habría anuncios del Gobierno en torno de la baja de precios de hasta el 10 por ciento en los autos nacionales y también podría haber mejoras en el esquema de financiamiento para la compra de vehículos.
Los gobiernos de Argentina y Brasil firmaron el acuerdo con la idea de dar previsibilidad y reactivar ambas industrias. Va a regir por un año, hasta que se negocie en 2015 toda la política automotriz común, que incluye cuestiones de fondo en la definición de la estrategia sectorial regional. El convenio bilateral permitirá que la industria argentina incremente su participación en el mercado vecino. También restablece el coeficiente flex, que limita el nivel de desequilibrio comercial.
Ayer Giorgi explicitó en una entrevista con Radio Del Plata que el piso de participación de autos argentinos en Brasil del 11 por ciento acordado días atrás implica la exportación de 130 mil vehículos adicionales en el próximo año, teniendo en cuenta que el peso en lo que va de 2014 de los vehículos en el país vecino es inferior al 8 por ciento. La funcionaria remarcó que el acuerdo también “debilita fantasmas agoreros respecto del rol del Mercosur y su eje de crecimiento como plataforma en la región, y de ahí, hacia el mundo”. Puso como objetivo que ambos países, que conforman el cuarto mercado en el mundo, avancen en sustituir 34 mil millones de dólares que en la actualidad se importan de extrazona en autopartes por producción regional.
Desde el sector privado elogiaron el acuerdo. “La industria automotriz en el Mercosur alcanzó un alto grado de integración y complementación productiva a lo largo de los años. El sector destina alrededor del 50 por ciento de su producción para abastecer el mercado de Brasil y, por ese motivo, es importante haber alcanzado este acuerdo transitorio por 12 meses que asegura la continuidad del flujo de comercio”, señaló Enrique Alemañy, titular de Adefa y presidente de Ford Argentina. En tanto, Fabio Rozenblum, de AFAC, que nuclea a los autopartistas, consideró que el convenio “nos da un marco de certeza que nos permite pensar en inversiones de largo plazo. El desafío a futuro pasa no sólo por resguardar el mercado, sino también por aumentar la participación nacional en la fabricación de autopartes, y en esta materia el acuerdo ha sido muy auspicioso”. El presidente de Adimra, Gerardo Venutolo, resaltó que la medida “asegura la participación del sector en la mesa de trabajo que va a elaborar las condiciones del nuevo acuerdo que se firmará el año próximo”.
En diálogo con este diario, Antonio Carlos Meduna, de Abipeças (entidad que agrupa a autopartistas de Brasil), indicó que “en el último período, los gobiernos conversaron muy poco. Ahora, según las últimas reuniones, queda clara la voluntad política para definir un nuevo acuerdo automotor. Vamos a trabajar en conjunto para que no haya inversiones fuera del Mercosur que se destinen a abastecer la demanda del bloque regional”.
Por el lado sindical, el titular de Smata, Ricardo Pignanelli, dijo que “el acuerdo con Brasil permitirá la venta de 40 mil unidades más que el año pasado”. Adelantó también que las terminales automotrices podrían aplicar una baja de precios del orden de hasta el 10 por ciento.
En efecto, la semana pasada el equipo económico mantuvo reuniones con las automotrices para pedirles que apliquen descuentos del 10 por ciento en los modelos nacionales. Las empresas presentaron su oferta y durante esta semana varias fueron consultadas para que mejoren su propuesta. “Se está trabajando con la industria porque estimamos que hubo incrementos internos que fueron excesivos. Creemos que si los autos estuvieran más baratos, hoy se venderían más, no hay que ser mago para hacer esa cuenta”, dijo el ministro de Economía, Axel Kicillof. Se espera que la semana que viene haya anuncios.
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