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“Hay un argumento que a mí me llama mucho la atención y que es común absolutamente a todos los bloques. Les da pánico la discrecionalidad de un funcionario público, de un secretario de Estado. ¿No le tienen miedo a la discrecionalidad de las empresas monopólicas? ¿No le tienen miedo a la discrecionalidad de Techint, de Telefónica o de Coto? Ustedes tomaron una decisión política y esta vez eligieron ponerse del lado del más fuerte, del más poderoso.” Esto fue parte del discurso de cierre de la diputada Juliana Di Tullio, cerca de las 2 de la mañana, previo a la votación de los cambios a la Ley de Abastecimiento. El Frente para la Victoria consiguió 130 votos afirmativos junto a sus aliados de Nuevo Encuentro, el Frente Renovador de Misiones y el Frente Cívico por Santiago. El diputado Omar Plaini, distanciado por el momento del oficialismo, también acompañó la norma. La UCR, el PRO, Compromiso Federal, Unen y el Frente Renovador de Sergio Massa alcanzaron los 105 votos en contra. Cinco diputados del Movimiento Popular Neuquino y tres de Unidad Popular se abstuvieron. El observatorio de precios fue aprobado por 136 a 104 y el nuevo fuero para los consumidores, 203 a 35.
Sergio Massa llegó al Congreso el miércoles por la tarde, estuvo unos minutos en su banca y luego se recluyó en los despachos de la propia Cámara. Allí tuvo tiempo de sacarse una foto con su nuevo aliado, Facundo Moyano. El tigrense no manifestó su postura sobre las leyes puestas a discusión. Massa suele cruzarse en otros espacios con Martín Insaurralde, diputado del Frente para la Victoria. Ayer, cada uno estuvo por su lado, no hubo gestos de acercamiento entre ambos. En cambio, el legislador de Lomas de Zamora se dejó ver con Héctor Recalde u Omar Plaini, además de votar junto al FpV. Toda una definición política en la madrugada del jueves.
“Quiero que observen que esta ley tiene una característica fundamental, que es la indeterminación. En este caso la indeterminación crea zozobra, imprevisibilidad y desconfianza, porque se invocan ganancias abusivas sin determinar nada, ni el acaparamiento de la materia prima ni cómo ni qué dimensión tendrá”, indicó el radical Mario Negri al cierre del debate parlamentario.
El debate estaba planteado para durar 24 horas, pero cerca de las ocho de la noche del miércoles comenzaron las negociaciones para reducir la cantidad de oradores. Finalmente, la sesión duró 14 horas. Un legislador del FpV, que se bajó de la lista de oradores, recordó a este diario que el propio radicalismo tuvo su ley de abastecimiento. El 13 de febrero de 1964, el presidente radical Arturo Illia promulgó en el Boletín Oficial la Ley Nacional de Abastecimiento. En su artículo segundo definía que las actividades comprendidas en ese régimen legal eran “las materias primas, productos elaborados, medicamentos, productos para la construcción, higiene y sanidad”, entre otros.
En 1985, la Corte Suprema declaró la constitucionalidad de la ley de abastecimiento de Perón (1974). El dictamen al que adhirió la Corte fue redactado por Andrés D’Alessio, juez del Juicio a las Juntas nombrado por Alfonsín. Estos antecedentes quedaron afuera de los argumentos del bloque radical.
El diputado Omar Plaini reivindicó la lucha de los trabajadores que en 1998 se manifestaron en contra de la flexibilización laboral. Con ese argumento, votó de manera afirmativa los tres proyectos. En cambio, los diputados del Frente de Izquierda votaron en contra de las modificaciones a la Ley de Abastecimiento y la creación de un observatorio de precios. El PRO y la Coalición Cívica, que integra el frente Unen, fueron los dos bloques que se opusieron a todo el paquete de leyes.
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