Economía impulsará antes de fin de mes una serie de reformas al régimen tributario, que incluyen la modificación del impuesto al cheque, la eliminación de las exenciones al gravamen a los combustibles y el fin de cuatro planes de competitividad. Fuentes de Hacienda informaron que “está planeado hacer ingresar al Congreso antes de fin de mes un nuevo paquete de reformas”. Se quiere “reducir la alícuota del impuesto a las transacciones financieras, o bien permitir aplicarlo al pago de Ganancias antes del segundo semestre del año que viene”. La propuesta de modificación del impuesto al cheque, comprometida con el FMI, se enviará luego de que su recaudación retrocediera debido, aparentemente, a que el público evita realizar transacciones bancarias para eludir el pago del pesado gravamen. En principio, la alícuota podría ser reducida del 0,6 al 0,3 por ciento. Junto con esta iniciativa, el Gobierno dejará caer en diciembre los planes de competitividad que benefician al sector de transporte de pasajeros, las explotaciones mineras, la fabricación de productos de madera y el sector automotor. Quedarán vigentes sólo los que benefician a las exportaciones cárnicas y a los actores y las producciones de espectáculos, que no tienen gran impacto en las cuentas públicas. De los cuatro planes que fenecerán, el secretario de Hacienda, Carlos Mosse, se encuentra buscando junto con su par de transporte, Hugo Jaime, alternativas para beneficiar a los colectiveros. Entre las opciones se maneja un sistema similar al del subsidio al gasoil, que toma en cuenta la cantidad de kilómetros que recorren los rodados y el número de pasajeros que transportan. Quedará para 2005 una “eventual” reducción de las retenciones a las exportaciones, la cual dependerá del precio de los productos, tanto en el mercado mundial como en el interno, y el nivel de recaudación que se haya obtenido.
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