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Luego de varias semanas de conflicto, el gobierno nacional aceptó aportar 250 millones de dólares para sostener el precio del barril de petróleo en Chubut, mientras que la provincia aportará otros 40 millones. Por su parte, las operadores PAE (Bulgheroni) y Tecpetrol (Grupo Techint) absorberán un costo de 4 dólares por barril. De esta manera, los trabajadores petroleros aceptaron no realizar medidas de fuerza por seis meses, mientras que la operadoras se comprometieron a no despedir a nadie. Los gremios realizarán un control mes a mes para evaluar la situación. De esta manera, quedó desactivado, al menos por seis meses, un conflicto que tenía en vilo 5000 puestos de trabajo. Más allá de este conflicto, el gobierno de Mauricio Macri sigue insistiendo con la importación de energía, en detrimento de incentivar la producción local. El sábado pasado, el secretario de Estado de Chile, Máximo Pacheco, confirmó sus negociaciones con Juan José Aranguren para que Argentina comience a importar gas en el corto plazo, y en un mediano plazo, energía eléctrica.
“Fuimos avanzando hasta llegar a una respuesta transitoria pero respuesta al fin. Por seis meses se garantizan los puestos de trabajo y todos los meses habrá una reunión mensual para hacer un seguimiento de lo acordado”, sostuvo Mario Das Neves, gobernador de Chubut, al finalizar el encuentro del que participaron también los gremios, las petroleras y los ministros de Energía (Aranguren), Interior (Rogelio Frigerio) y Trabajo (Jorge Triaca).
La reunión arrancó a las cinco de la tarde. El momento más tenso llegó cuando las dos operadoras, PAE y Tecpetrol, “recomendaron” que sea el mercado el que fije el valor del petróleo. En un primer momento, el macrismo había adoptado la misma postura. Frente a ese planteo, Das Neves afirmó que si no hacían su aporte, “se abrían las condiciones para perder las concesiones”. “Hay que tener en cuenta que en estos años las petroleras se llevaron mucha plata, como 9000 millones de dólares. En concesiones que duran 40 años, no siempre se gana”, explicó a Página/12 Jorge Avila, secretario general del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Chubut y titular de la empresa estatal de minería.
Dentro del acuerdo, el Gobierno aportará 8 dólares por barril, mientras que la provincia subsidiará el crudo con 2 dólares por barril y las petroleras absorberán un costo de 4 dólares. De esta manera, todos ponen un poco para subir el crudo de importación en 14 dólares por barril. El otro aspecto que estuvo en la mesa de discusión fue la inversión que deberán hacer las petroleras y el Estado en la refinería que procesará el crudo pesado que se extrae de Chubut. La administración de Macri se comprometió a finalizar la obra en agosto, con una inversión estimada en 400 millones de dólares.
Mientras todo esto ocurre, Aranguren no deja de planificar la importación de energía. Al principio del conflicto con Chubut, el funcionario había “amenazado” con esta posibilidad. Sin embargo, el escenario importador es independiente del conflicto puesto en stand by por seis meses. En su intento de ingresar a la Alianza del Pacífico, la administración macrista buscará dar un primer paso con la compra de gas a Chile. El secretario de Estado chileno confirmó el fin de semana que la venta del gas chileno sería transportado por los gasoductos Nor Andino, de la Segunda Región, y Andes, de la Región Metropolitana, con un intercambio equivalente a 130 millones de dólares al año. Según difundió el portal Economía y Negocios, las pruebas de bombeo comenzarían este mes.
“Querían desactivar la protesta de los petroleros con el argumento de la importación de energía. Pero en el fondo esto significa desactivar el camino hacia el autoabastecimiento reiniciado en 2012. Las gestiones para importar gas desde Chile van en la dirección contraria. Apostar a la producción local tiene costos (económicos) pero es estratégica si se pretende alcanzar el desarrollo y la soberanía energética”, sostuvo a este diario el investigador del Observatorio de la Energía, Tecnología e Infraestructura para el Desarrollo (Oetec), Ignacio Sabbatella.
Durante el período enero-noviembre de 2015, la producción gasífera se incrementó 3,7 por ciento, mientras que los volúmenes de importación de gas boliviano y de GNL disminuyeron en un 13,6 por ciento.
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