Imprimir|Regresar a la nota
El mundo|Martes, 2 de diciembre de 2008
Perú no releva al general que hizo declaraciones antichilenas

Si no se va, Chile no se amiga

El presidente Alan García le había asegurado a la presidenta chilena que el comandante en jefe del ejército, Edwin Donayre, sería relevado, pero no fue así, y además Donayre hizo declaraciones públicas desafiantes.

Por Carlos Noriega
/fotos/20081202/notas/na25fo01.jpg
El presidente Alan García no da de baja al general Edwin Donayre y enfrenta una crisis diplomática.

Desde Lima

Los ecos de las palabras del jefe del ejército peruano, general Edwin Donayre, amenazando con enviar muertos a su país a los chilenos que ingresen al Perú, siguen retumbando en La Moneda y han puesto las relaciones entre Perú y Chile en una difícil situación. La decisión del gobierno peruano de mantener al general Donayre y recientes declaraciones de éste afirmando que no se arrepentía de sus amenazas contra los chilenos han reavivado el conflicto entre los dos países, que parecía superado luego de que el gobierno peruano se disculpara la semana pasada por el exabrupto del jefe militar. Parlamentarios chilenos han acusado al presidente Alan García de tener una actitud “débil” y “cómplice” frente a los ataques antichilenos de su jefe del ejército por no ordenar su destitución. El gobierno peruano ha respondido que no acepta las “presiones” de Santiago para cambiar al comandante general del ejército.

El incidente diplomático estalló hace una semana, cuando se hicieron públicas las imágenes de una reunión social, realizada en noviembre de 2007, en las que el jefe militar peruano hacía un brindis por la muerte de los chilenos que ingresen al Perú, a quienes amenazó con enviar de vuelta a su país en cajones o en bolsas de plástico. El presidente Alan García llamó por teléfono a Michelle Bachelet y, según declaró la presidente chilena a la prensa, el presidente peruano le aseguró que el general Donayre sería pasado a retiro por sus expresiones. Bachelet quedó satisfecha y dio por superado el problema. Todo parecía volver a la calma, pero la promesa de García de sacar a su jefe militar no se cumplió y en los últimos días Lima y Santiago se han enfrascado en una escalada verbal de recriminaciones y críticas mutuas.

En medio de ese intercambio verbal, el general Donayre reapareció este domingo y agravó aún más la crisis. “No me arrepiento”, aseguró, al comentar sus declaraciones antichilenas, que el propio gobierno peruano había criticado. Pero no contento con eso, el jefe del ejército aseguró que no le corresponde pasar a retiro el 5 de diciembre, como ha anunciado el gobierno. “A mí me quedan dos o tres años de servicio”, afirmó, en actitud desafiante.

“Cualquier país decente, civilizado, ya habría sacado al general Donayre. Si el presidente del Perú no lo destituye, se está haciendo cómplice de sus palabras y eso sería extremadamente grave”, disparó desde Santiago el senador de la UDI Hernán Larraín. El gobierno chileno insiste en que el general Donayre sea relevado inmediatamente de su puesto. “Estamos a la espera de que el gobierno del Perú cumpla con lo que dijo, de que este general va a ser retirado como comandante en jefe del ejército porque lo que había dicho es inaceptable”, demandó el canciller chileno, Alejandro Foxley, quien aclaró que su gobierno solamente daría por superada la impasse diplomático con Perú cuando el general sea destituido. “El Perú no acepta órdenes ni presiones extranjeras”, le respondió el presidente García.

El canciller peruano, José Antonio García Belaunde, aseguró que el presidente García no se comprometió con la presidenta chilena a destituir al general Donayre, tal como Bachelet le aseguró a la prensa. “Lamento mucho que el canciller chileno dramatice en exceso una situación generada por desa-fortunadas expresiones personales formuladas en el marco de una reunión privada. Reiteramos que en el Perú nadie está de acuerdo con esas expresiones”, señaló García Belaunde. Pero el gobierno chileno, que canceló la visita que el ministro de Defensa del Perú, Antero Flores Aráoz, debía realizar ayer, ha dejado claro que sólo la destitución del general Donayre puede enfriar la crisis diplomática. El gobierno peruano ya anunció que no lo va a destituir y que esperará el cinco de diciembre para pasarlo a retiro, según lo previsto con anterioridad. Aunque ahora el general Donayre, envalentonado con el respaldo del gobierno, pone en duda su pase al retiro en esa fecha.

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.