Imprimir|Regresar a la nota
El mundo|Martes, 25 de mayo de 2010
La influencia que ejerce el premier italiano sobre la RAI

Renunció por no ser pro-Berlusconi

Por Michael Day *
Desde Milán

Una de las principales conductoras de noticias abandonó de pronto su trabajo en la televisión estatal, después de afirmar que su cobertura estaba influida a favor del premier y magnate de los medios, Silvio Berlusconi. Se dice que Maria Luisa Busi, que presentaba el noticiero de la noche de TG1 en el canal RAI 1, les dijo a los jefes lo que pensaba de la línea editorial del programa en una carta abierta.

Su súbita partida durante el fin de semana es la continuación de una serie de choques con el editor de TG1, Augusto Minzolini, que fue elegido a dedo por Berlusconi. El comité editorial de TG1 expresó su inquietud “sobre la dirección que Augusto Minzolini ha hecho tomar a TG1”. El veterano periodista y presidente de la RAI, Paolo Garimberti, añadió: “La decisión de Maria Luisa es otra señal perturbadora de una situación que requiere la máxima atención de la alta dirigencia de la empresa”.

Además de controlar tres de los siete canales de aire como parte de su imperio Mediaset, Berlusconi ejerce considerable influencia sobre el nombramiento de los altos cargos de la emisora rival y estatal RAI. Y fue para combatir lo que él sentía que era una influencia de izquierda que el premier empujó el nombramiento de Minzolini el año pasado.

Desde entonces, han surgido las acusaciones contra Minzolini por su actitud pro gobierno. El show de TG1 de Minzolini, junto con su principal rival en la propia red Mediaset de Berlusconi, fue multado por el controlador de emisoras Agcom por darle menos espacio al Partido Demócrata de la oposición y más al partido de Pueblo de la Libertad de Berlusconi antes de las elecciones regionales de marzo.

El verano pasado, TG1, junto con otros noticieros de la RAI, fue criticado por ignorar en su mayor parte los escándalos que rodeaban la vida privada de Berlusconi. En contraste, la noticia de que un turbio empresario había pagado a prostitutas para asistir a las fiestas en las residencias del primer ministro en Roma y Cerdeña fue cubierta extensamente por los canales La7 y Sky Italia de Rupert Murdoch.

Minzolini esté siendo investigado junto con Berlusconi por sospechas de tratar de cancelar el talk-show de la RAI, AnnoZero, que informó sobre las desgracias del jefe de Estado. Minzolini negó ayer que TG1 hubiera tomado una posición pro gobierno. “No concuerdo con una sola línea de la carta de Busi –le dijo a la agencia de noticias ANSA–. Mi programa de noticias nunca fue parcial. Les he dado la voz a todos y los ratings hablan por mí.” La reacción a la partida de Maria Luisa subraya la naturaleza políticamente polarizada de la televisión italiana. Antonio Di Pietro, el líder de partido de la oposición Italia de los Valores, alabó su profesionalismo mientras que Daniele Capezzone, el vocero del partido de derecha de Berlusconi, apoyaba a Minzolini. Busi también se quejó de que el contenido del programa había bajado el nivel intelectual, dándole mucho espacio a las noticias sensacionalistas y no suficiente al deterioro de las escuelas y los hospitales.

De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Celita Doyhambéhère.

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.