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El mundo|Jueves, 10 de junio de 2010
La secretaria de Estado Hillary Clinton se reunió con los candidatos colombianos y con Uribe

Economía, bases militares y DD.HH.

La enviada de Obama dialogó con los candidatos Santos y Mockus. Con el ex ministro de Defensa hablaron de las bases norteamericanas que EE.UU. acordó instalar en Colombia; con Mockus trataron la persecución a los sindicalistas.

Por Katalina Vásquez Guzmán
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El candidato favorito, Juan Manuel Santos, dijo que la reunión con Hillary fue “fructífera”.

Desde Medellín

Camino al ballottage por la presidencia de Colombia, la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, visitó Bogotá, se reunió con los candidatos presidenciales y firmó nuevos acuerdos de cooperación con el mandatario Alvaro Uribe. Economía, bases militares, derechos humanos, sindicalismo y cultura fueron los temas tratados en los diálogos que cruzó la funcionaria de Washington en su primera visita al país.

Al comenzar el día, Clinton tuvo un encuentro con el ex ministro de Defensa Juan Manuel Santos, candidato del Partido de la U que ganó la primera ronda de votaciones para la presidencia y que, según las más recientes encuestas, sería el ganador en el ballottage del próximo 20 de junio. Santos dijo que se trató de una reunión “fructífera”. Sobre la presencia de militares norteamericanos en bases colombianas, “acordamos que eso fue una tormenta en un vaso de agua”, dijo el candidato a los medios reconociendo que “se cometió un error al no ser abiertos y transparentes desde un principio en publicar ese acuerdo que nada tiene de malo”.

Sin referirse a un país en particular, Santos dijo que el acuerdo “nada tiene que pueda ser interpretado como un peligro para una tercera nación”. Venezuela dijo en reiteradas ocasiones que la presencia militar estadounidense en Colombia es una amenaza para ese país. Pero las relaciones con esta nación vecina no fueron tema de la agenda de Clinton, quien le explicó al candidato oficialista que no es por falta de voluntad del gobierno de Barack Obama que el tratado de libre comercio no esté aprobado. “Es un tema legislativo”, explicó.

También, la emisaria de la Casa Blanca se reunió con Antanas Mockus, el otro presidenciable por el Partido Verde. El candidato expuso los principales puntos de su programa de gobierno reiterando que la “ilegalidad es el gran obstáculo que enfrenta hoy Colombia para su desarrollo”. Según la oficina de prensa de Mockus, la secretaria “se declaró impresionada gratamente por el énfasis de la campaña pues considera que el cambio cultural y social es el gran reto que tiene no sólo Colombia, sino América latina”.

En su diálogo con Clinton, Mockus trató el tema de protección a sindicalistas, una de las piedras en el zapato del actual gobierno para conseguir la aprobación del TLC por parte del Congreso norteamericano. “La ley permite en Colombia los sindicatos, pero todavía hay espacios culturales y sociales en donde se odia al sindicalista o por lo menos se le tiene pavor o temor y eso es incomprendible para los Estados Unidos”, dijo el filósofo y matemático. En cuanto al narcotráfico, coincidieron en que lo importante es “combatir el pecado y no al pecador”.

Compartiendo un almuerzo en su honor en la Casa de Nariño, Clinton dialogó con el canciller colombiano, Jaime Bermúdez, y el presidente Uribe acerca de terrorismo, lucha contra el narcotráfico y democracia en la región. Con Bermúdez, y Uribe como observador, la secretaria firmó un acuerdo que busca fortalecer la asistencia a Colombia en las áreas de cooperación e innovación científica, técnica y tecnológica.

A su paso, Hillary Clinton exaltó la labor del gobierno de Alvaro Uribe. Este respondió con halagos para su esposo Bill Clinton, quien también estuvo ayer en Bogotá, y agradeció a la señora y a la administración de Barack Obama “por su cooperación con Colombia”. Para recibirlos, Uribe les presentó un grupo de ex guerrilleros y ex paramilitares con los que estaba reunido previo al encuentro de altos funcionarios. Los desmovilizados le hablaron a Clinton de por qué abandonaron la guerra y cómo pudieron “reiniciar una nueva vida de la mano de la legalidad y aceptados por la sociedad”, según Bogotá.

Mientras tanto, la baraja de apoyos para las elecciones presidenciales definitivas se inclinó a favor de Santos. El candidato de Cambio Radical, Germán Vargas Lleras, se sumó a la campaña del oficialista, que ahora invita hasta a su mismo contendor, Mockus, a participar de su “gobierno de unidad nacional”. El candidato de Uribe gana ventaja en los sondeos de opinión, obteniendo más de 30 puntos porcentuales de diferencia. Ayer, el Consejo Nacional Electoral avaló los preconteos de las votaciones del 30 de mayo, donde Santos sobrepasó a Mockus en 3.667.821 votos.

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