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Desde Nueva York
Una cada vez más segura Hillary Clinton le dió total crédito a su compañero de fórmula Tim Kaine por su for sostenido aporreo a Mike Pence, el candidato a vicepresidente republicano en su debate, aún cuando la mayoría de los expertos y las encuestas instantáneas lo dieron como perdedor. Ambos campos declararon la victoria después del encuentro que a menudo es una prueba, entre los dos candidatos a vice presidente en Virginia el martes, aunque el alivio fue más audible entre los republicanos que necesitaban un respiro después que Donald Trump tambaleara en su primer debate con Clinton el mes pasado.
El rebote de Clinton post debate se sigue fortaleciendo. El miércoles, una nueva encuesta de Ispos-Reuters le daba un seis por ciento de vantaja a nivel nacional, un punto más que la encuesta de CNN-ORC que se conocío el martes. En varios estados claves puede estar a la cabeza. Que ese momentum siga claramente con los demócratas servirá para aumentar la presión sobre Trump que la enfrentará en un segundo debate en St. Louis, Missouri el domingo. Ese debate se dará en un formato estilo intendencia, con los candidatos respondiendo a las preguntas de la audiencia.
La reciente caída de los republicanos puede rastrearse al primer debate con Clinton en la Universidad Hofstra en Nueva York en 26 de septiembre, pero también a varias heridas, algunas autoinfligidas, que Trump sufrió en los dias siguientes. Primero, Trump optó por seguir atacando a una ex candidata a Miss Universo a la que Clinton había identificado como víctima de su desdén durante el debate, incluyendo un aluvión de tweets enviados antes del amanecer, un permanente drama sólo por los informes del fin de seman que podría haber evadido impuestos a las ganancias durante casi dos décadas después de perder más de 900 millones de dólares en 1995.
El espacio para que Trump revierta la dinámica de la carrera es ahora peligrosamente angosto. Queda a penas un mes de campaña hasta el día de la elección. Sin embargo, se espera que tanto como un 40 por ciento de los votantes entreguen sus votos mucho antes. El voto anticipado ya está en marcha en estados difíciles como Iowa y Wisconsin y está por comenzar en Florida y Carolina del Norte.
El debate vice-presidencia fue uno tempestuoso, marcado por Kaine repetidamente exigiendo que Pence, quién es el gobernador de Indiana, ofreciese una defensa a una serie de controversias creadas por Trump durante la campaña, ya sea humillando a las mujeres, calumniando a los mexicanos, diciendo que su éxito al evadir impuestos lo hace “inteligente” y cuestionando la ciudadanía del presidente Barack Obama. Todo se reducía, dijo, a que Trump hiciera una campaña “basada en el insulto”.
También presión a Pence sobre Trump cuando este sugirió que Japón y Arabia Saudita deberían considerar comprar armas nucleares y declaró su admiración por Vladimir Putin. “Como candidato, Trump comenzó su campaña con un discurso en el quellamó a los mexicanos violadores y criminales y ha insistido en la desacreditada y realmente indignante mentira de que el presidente Obama no había nacido en Estados Unidos”, dijo Kaine. “No puedo imaginar como el gobernador Pence pude defender el estilo de insulto y egoismo de Donald Trump”.
Pence, un ex locutor radial, se mantuvo incólumne, repitiendo una y otra vez que su rival torcía los hechos. Pero también se despegó de su cabeza de fórmula al destacar el peligro que representa al mundo una Rusia nuevamente agresiva, aunque reponsabilizar a una “debil y descuidada” política exterior de Obama y Hillary Clinton. La jefa de campaña de Trump, Kellyanne Conway dijo ayer que Kaine actuó “como si tuviera un tic nervioso” al nombrar tantas veces a Trump en el debate.
Pero al abordar un avión particular cerca de su casa en Nueva York Clinton hizo el gesto de dos pulgares cuando le preguntaron cómo había estado su compañero de fórmula.
Su momkento más efectivo puede haber sido cuando presionó a Pence sobre la negativa de Trump a mostrar su declaración de impuestos. El republicano respondió, como muchos republicanos ya han hecho, sugiriedo que la evasión de impuestos federales demuestra la habilidad para los negocios que tiene Trump. “Su declaración de impuestos muestra que pasó por momentos muy difíciles, pero usó el código impositivo como se debe,” venturó Pence, antes de agregar: “Y lo hizo de manera brillante.”
Versiones de que Trump estaba enjado porque Pence lo había superado en sus habilidades retóricas fueron rechazadas con furia por la campaña republicana. “Simplemente no es verdad,” conway le dijo a la cadena MSNBC. “Su último tuit de anoche muestra lo contento que estaba lo orgulloso que estab de Pence. Hablaron anoche. Hablé con el señor Trump varias veces durante el debate.”
La campaña demócrata avanza con Hillary salteándose algunos actos para prepararse para el debate del domingo, mientras sus principales reemplazos, incluyendo a Bill y Chelsea Clinton, se desplegaron en los estados clave para tratar de asegurarse que la tendencia favorable que ahora aparece con claridad puyeda sostenerse. Buenas noticias para su equipo: saca ventaja en estados clave como Florida Carolina del Norte y Pensilvania. Trump parace mantener una leve ventaja en Ohio. Pero sin Florida triunfar el 8 de noviembre se le hace demasiado cuesta arriba.
“Lo que me da confianza en este momento es que tenemos varios caminos posibles para llegar a la Casa Blanca,” Robby Mook, jefe de campaña de Clinton, le dijo a Politico. “Me gustan nuestras chances en todos los estados clave en este momento, en parte por nuestro trabajo territorial. El desafío es muy grande para Trump. yo diría que tiene que ganar en Florida y en Carolina del Norte y probablemente en Pensilvania. Y ése es un sendero muy angosto.”
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
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