El partido del presidente Mijail Saakashvili (foto), héroe de la Revolución de las Rosas que derrocó a los líderes previos, se impuso con el 78,6 por ciento de los votos en las elecciones parlamentarias con una masiva participación electoral. El presidente de la Comisión Electoral Central (CEC) señaló que, “por lo general, las elecciones transcurrieron con normalidad”, pero se produjeron incidentes en la Adjaria autónoma y la región Kvebokartli, situada en la frontera con Azerbaiyán. Las encuestas de boca de urna daban como ganador al Movimiento Nacional-Frente Democrático, liderado por el joven y apasionado Saakashvili, quien es casi universalmente admirado en Georgia. Su partido ha prometido terminar con la corrupción de la era Shevardnadze. Hoy, los sueldos se pagan en tiempo y forma, las pensiones del Estado han aumentado y se está introduciendo un código impositivo apropiado. Pero las elecciones de ayer se ensombrecieron por la disputa entre el gobierno central y el territorio separatista de Adjaria. Este mes el país estuvo al borde de un conflicto armado después de que las autoridades le prohibieran a Saakashvili entrar a la región semiautónoma. El presidente reaccionó imponiendo duras sanciones económicas y poniendo en alerta máxima a su ejército. La comunidad internacional, liderada por Rusia y Estados Unidos, intercedieron para evitar una guerra civil.
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