Imprimir|Regresar a la nota
El mundo|Martes, 6 de mayo de 2008
Lo afirma el ministro de la Presidencia de Bolivia, Ramón Quintana

“Estamos dispuestos a dialogar”

El gobierno calificó de fracaso la consulta. El funcionario de Morales, Quintana, señala que es hora de “poner orden constitucional”, y Rubén Rada, ministro de Gobierno, enfatiza que Santa Cruz “está dividida”.

Por S. O.
/fotos/20080506/subnotas/na20fo01.jpg
Desde el gobierno de Evo Morales prometen que, si hay diálogo, será entre sordos.

El gobierno boliviano evaluó como “fracaso rotundo” el referéndum considerado “un éxito” por la Prefectura cruceña. Prometen que el diálogo –cuando haya– todavía será entre sordos. El diputado del MAS Jorge Silva afirmó que “no hubo ninguna derrota, hubo triunfo. Ellos pensaban pasar la votación del referéndum autonómico de julio del 2006, pero no fue así”. El ministro de la Presidencia, Ramón Quintana, explicó que en la consulta de 2006 “en el departamento de Santa Cruz se emitieron 692.187 votos, de los cuales 656.448 fueron válidos. De allí que se estableció que el 71 por ciento (466.826 votos) le dijo ‘Sí’ a la autonomía departamental y ‘No’ 189.622 votos (28,8 por ciento)”. Y comparó: “El domingo 4 de mayo la votación no pasó de los 550 mil votos, es decir menos 100.000 votos con relación al 2006, pese a que se incrementó de 700 mil a casi un millón su padrón electoral este 2008”.

“Por eso –agregó Quintana– hay una derrota estrepitosa para esa fuerza política que ha conducido este proyecto de consulta. Lo que también hay que preguntar es qué ocurrió con su millón del cabildo de 2006, porque resulta que hoy apenas tenemos menos de medio millón votando. Esto muestra que han perdido su legitimidad.”

En Montero el ausentismo fue del 63 por ciento. Del 37 por ciento que votó, el 92 por ciento dijo Sí al estatuto. Por ahora, la CDE se limita a dar los números por el Sí. Según datos del canal ATB y otros medios, en todo el departamento sólo el 60 por ciento fue a las urnas.

En el área rural, el 46,8 por ciento se abstuvo. En la localidad de Camiri, el 42,6 por ciento no votó, en Puerto Suárez se abstuvo el 32,8 por ciento, en Portachuelo el 20,1 por ciento evitó el referéndum.

Para el ministro de Gobierno, Alfredo Rada, estos datos significan que “Santa Cruz ha quedado dividida: un 50 por ciento que se abstuvo, votó en contra, nulo o blanco, y un 50 por ciento que votó por el ‘Sí’”.

Sobre la continuidad del diálogo, Quintana indicó que “estamos dispuestos a sentarnos a dialogar para identificar aquellos aspectos que los propios prefectos observan. Es hora de poner orden institucional”. Y adelantó que “en términos de autonomía queremos descentralización del poder: que la gente, el pueblo indígena, el municipio, que la región pueda decidir, que todos sean capaces de acceder igualitariamente a los recursos; que construyamos una ciudadanía común para todos. Lo que tenemos que hacer es derrumbar esta suerte de condicionamiento en el uso de los recursos públicos”, evidenció.

José Ross, académico de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (Uagrm) e integrante de la organización Santa Cruz Somos Todos, observó que “los prefectos de la Media Luna van a dialogar después de que hagan los referéndum en Beni, Pando y Tarija, así van a sentirse más fuertes. Creo que la Organización de los Estados Americanos (OEA) no mediará y seguirá en su pose diplomática de siempre...” Sobre el alto porcentaje de ausentismo (también de veedores internacionales) indicó que “faltó poco (10 por ciento) para que sólo hubiera 50 por ciento de votantes. Si se hubiera alcanzado esa cifra, el referéndum habría sido anulado. Igualmente sirve para que la Prefectura reconozca que tiene que retocar su estatuto. Y a la hora de negociar, el gobierno nacional deberá ser firme para no ceder competencias del Estado. Si este estatuto entra en rigor así como está, será un desastre para la población porque la prefectura tendrá potestad sobre todos sus recursos”.

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.