Imprimir|Regresar a la nota
El mundo|Martes, 11 de agosto de 2009
Opinión

Correa corre con ventaja

Por Mercedes López San Miguel

Rafael Correa asume un segundo mandato desde una posición de fortaleza. Sólido y racional, el presidente ecuatoriano se sale del formato que se espera de un economista graduado en Estados Unidos. En su primer gobierno se enfrentó a los poderosos del establishment; por dar un ejemplo, ordenó que el Estado incautara empresas de comunicación ligadas a grupos financieros, una figura prohibida por la Constitución de ese país. El canal TC Televisión y una media docena de radios pertenecen a la oligárquica familia Isaías, vinculada con el banco Filanbanco.

Correa ganó cada una de las elecciones que impulsó. En 2008 logró el apoyo de la ciudadanía a su proyecto de dotar al país de una nueva Carta Magna, aprobada en referéndum en septiembre de ese año, y el pasado abril obtuvo la reelección. Su popularidad es alta, aunque en el último mes haya descendido de 65 al 50 por ciento (de acuerdo con encuestadoras confiables). Según un analista de Flacso, Felipe Burbano, pueden haber influido las denuncias de presuntos vínculos con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). “Los medios fuertemente opositores achacaron con el novelón de las supuestas relaciones de ex ministros con la guerrilla.”

La difusión de un video del líder rebelde “Mono Jojoy”, en el que afirmaba que el mandatario recibió dinero para la campaña de 2006, se produjo en el momento en que al presidente colombiano, Alvaro Uribe, empezaban a pedirle explicaciones por su acuerdo militar con Estados Unidos, acerca de las siete bases militares que Washington podría usar en su país.

Más tarde, las propias FARC desmintieron esa acusación y las bases volvieron a ser el tema central de la preocupación regional, a la par del golpe de Estado en Honduras. Correa, quien niega los cargos, señaló que fue Colombia la que, en marzo de 2008, invadió su espacio territorial para atacar un campamento de las FARC. “La frontera está deliberadamente desatendida con el fin de involucrar a mi país en esa guerra”, dijo el joven economista.

Correa es el presidente más popular que en treinta años haya tenido Ecuador, un país políticamente inestable. Burbano agrega otro elemento: no existe un opositor de la misma jerarquía política. “Ni el ex mandatario Lucio Gutiérrez ni el alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, representan una amenaza a su liderazgo. Nebot nunca ha instalado un solo tema de agenda nacional y el líder de Alianza Sociedad Patriótica ha perdido toda credibilidad tras su salida forzada por los movimientos sociales.”

Correa corre con ventaja.

[email protected]

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.