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El mundo|Viernes, 8 de febrero de 2008
OPINION

Final abierto

Por Fabian Calle *

1 El “supermartes” definió en gran medida el candidato republicano, con los triunfos alcanzados por John McCain, y dejó abierta la disputa entre Hillary y Obama. Esto les permitirá a los republicanos comenzar a pensar más en la “externa” que en la “interna” y con ello moderar el desgaste consiguiente.

2 McCain era visto desde el año pasado como el menos agradable de los candidatos para el establishment neoconservador y conservador de los republicanos y en especial por los sectores de la derecha religiosa, pero también se reconocía que era altamente competitivo en un eventual choque con los demócratas en noviembre de 2008. Ya varias personalidades conservadoras de peso, como H. Kissinger, y neoconservadores, como W. Kristol, le han dado su apoyo. Sus posturas fuertemente favorables a Israel también le brindan buen acceso al voto judío y el hecho de provenir de Arizona la da fuerte contacto con parte del voto latino.

3 McCain es difícil de definir en términos ideológicos. Se lo podría llamar un heterodoxo, en donde combina posturas de halcón en temas de política exterior como Irán, Siria, el radicalismo islámico y Corea del Norte, fuertes críticas y advertencias hacia China y Rusia y, por otro lado, un activo demandante del cierre de Guantánamo, un paladín en contra de la tortura, un moderado en temas migratorios y fiscales y un luchador en la batalla contra el financiamiento descontrolado de los grandes grupos económicos de las elecciones políticas en EE.UU.

4 Lo reñido de la primaria demócrata, si bien los triunfos de Hillary Clinton en Nueva York y California podrían marcar un peso decisivo, y la fuerte imagen positiva de McCain en sectores independientes, hace que las elecciones presidenciales tengan un final abierto. En el caso de que los sectores más conservadores y de la derecha religiosa republicana se abstengan de votar a un “no puro” como McCain, se incrementarían las posibilidades demócratas y se compensaría el desgaste (en especial a H. Clinton) que les provoca a sus candidatos una primaria tan reñida y con apoyos internos tan simbólicos e importantes para Obama.

* Profesor de Relaciones Internacionales UCA-Di Tella.

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