Imprimir|Regresar a la nota
El país|Jueves, 12 de noviembre de 2009
Elisa Carrió fue sobreseída en la causa por calumnias e injurias que le abrió Eduardo Duhalde

Palabras que al final se llevó el viento

La jueza María Servini de Cubría dijo que la líder de la CC le pidió disculpas al ex mandatario y que manifestó que no tuvo ánimo de injuriarlo cuando afirmó que controlaba la droga en la provincia. Disconforme, la chaqueña negó haberse rectificado.

Por Sebastian Abrevaya
/fotos/20091112/notas/na11fo01.jpg
La audiencia entre Elisa Carrió y Eduardo Duhalde, previa a la decisión de la jueza Servini de Cubría.

Después de escuchar el martes a Elisa Carrió y Eduardo Duhalde, la jueza María Romilda Servini de Cubría resolvió ayer sobreseer en la causa por calumnias e injurias a la líder de la Coalición Cívica, dado que la chaqueña le pidió disculpas a Duhalde, negó haber tenido intención de injuriarlo y el ex presidente aceptó sus explicaciones. La Justicia consideró que Carrió se retractó en cuanto a su ánimo de injuriar a Duhalde, de quien dijo en un programa televisivo que “controlaba la droga en la provincia de Buenos Aires”. Disconforme con la interpretación que se hizo al conocerse la decisión judicial, Carrió salió a denunciar “un intento por desnaturalizar el contenido del juicio y la sentencia” y exigió ejercer su derecho a réplica para aclarar que durante la audiencia no se desdijo, sino que “se ratificó en sus dichos”.

Carrió, en verdad, no dijo “me retracto”, pero tuvo que explicar que cuando calificó al ex gobernador como quien “controlaba la droga”, no lo estaba acusando de “narcotraficante” o “líder de un poder mafioso”, ni le imputaba una culpa criminal sino política. Enojada porque públicamente trascendió que se había retractado, la líder de la CC envió un acta reclamando su “derecho a réplica”: “La señora Jueza, en el tercer párrafo del considerando, señaló expresamente que Carrió ratificó sus dichos por los que fuera querellada, con lo cual no se desdijo de éstos, ni aceptó la falsedad de la especie vertida”, expresó la chaqueña.

En su escrito, Lilita decidió citar fragmentos de la sentencia, pero casualmente cortó la frase de la jueza antes de que concluyera esa oración del tercer párrafo. Servini de Cubría agregaba que, además de no aceptar “la falsedad de la especie vertida”, Lilita “reiteró que no tuvo ‘animus injuriandi’ y que se retractaba en cuanto a ese ánimo”. Esa parte respecto de su retractación “en cuanto al ‘animus injuriandi’” no fue incluida en el descargo de Lilita.

El juicio entre Duhalde y Carrió giró en torno del significado de la palabra “controlar”, que según Lilita, la Real Academia Española define como “saber y examinar”. Con esa explicación, Carrió sostuvo que al acusar al ex presidente no le adjudicaba una responsabilidad penal sobre el consumo y el tráfico de estupefacientes sino que le atribuía una “responsabilidad política”, porque conocía de la existencia de la droga “y no la combatía”.

La última edición de ese diccionario –disponible en Internet– dice que controlar significa “ejercer el control”, y entre las tantas acepciones de la palabra “control”, las únicas dos que podrían aplicarse son: “1. Comprobación, inspección, fiscalización, intervención. 2. Dominio, mando, preponderancia.” Durante la audiencia, Carrió reconoció que no tenía pruebas de la responsabilidad penal de Duhalde, ya que si no, “lo hubiera denunciado” ante la Justicia. En cambio, dijo que el ex gobernador tenía la “culpa política de todos los que ejercen cargos públicos”.

Hechas todas esas salvedades, Lilita también dijo que “nunca deseó afectar el honor de nadie y menos de la familia del querellante”. Esa frase la pronunció en el pequeño despacho de la jueza, en el que se encontraba el ex presidente acompañado de su mujer, Hilda “Chiche” González.

El ex presidente había iniciado acciones legales contra Carrió en julio de 2007, por sus declaraciones en un programa del canal Todo Noticias en julio de 2005. Allí había dicho textualmente: “Yo nunca hubiera hecho una alianza con Duhalde, porque siempre dije que controlaba la droga en la provincia de Buenos Aires, y reitero que jamás hubiera hecho una alianza con el poder mafioso.”

En la sentencia, Servini de Cubría explicó que fue el abogado de Duhalde, Mariano Fragueiro Frías, quien se dio por satisfecho con las disculpas de Lilita y anunció que dejarían de impulsar el juicio. En el mismo acto, la jueza desestimó por abstracto el pedido de inconstitucionalidad de las abogadas de Carrió y fijó que cada parte pague las costas de sus letrados. Por último, la resolución fija como fecha de audiencia para la lectura de los fundamentos el 24 de noviembre.

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.