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El país|Sábado, 5 de junio de 2010
Hugo Alvarez trabaja en la SIDE, pero no se sabe si es quien le avisó a Burstein que lo escuchaban

“No se puede decir con certeza que sea”

La pericia de Gendarmería no pudo determinar, comparando las fotos de Alvarez, que la imagen registrada en el locutorio sea la del agente. El juez Oyarbide lo citó para el lunes. En el juzgado explicaron que ese dato no altera la prueba contra Macri.

Por Irina Hauser y Raúl Kollmann
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La SIDE, que dirige Héctor Icazuriaga, informó que Alvarez es agente de la agencia.

Un peritaje realizado por la Gendarmería no pudo determinar anoche si el agente de la SIDE Hugo Alvarez fue quien realizó la llamada anónima que puso en marcha la causa de las escuchas ilegales. “Tiene características morfológicas similares, pero no se puede determinar con certeza que sea la misma persona.” Igualmente, el juez Norberto Oyarbide resolvió citar a Alvarez para que declare en la causa de las escuchas el próximo lunes. La difusa imagen tomada por una cámara de seguridad del locutorio desde el que se hizo la llamada alertando sobre la existencia del espionaje, se comparó con una foto que el diario Clarín le sacó a Alvarez esta semana. La causa judicial y el procesamiento de Mauricio Macri no cambian demasiado porque, de todas maneras, resultó cierto el dato que reveló la voz anónima a la familia de Sergio Burstein, el dirigente de la agrupación Familiares de las Víctimas de la AMIA: que estaba siendo espiado por orden de Jorge “El Fino” Palacios, el policía de íntima relación con Macri.

En tiempo record, la SIDE le contestó el oficio al juez Oyarbide, confirmándole que el sujeto mencionado por fuentes macristas desde el lunes y difundido el jueves por los diarios Clarín y La Nación, es efectivamente un agente de inteligencia. Faltaba probar que esa persona fue la que realizó la llamada anónima desde el locutorio de Avenida de Mayo 1343 y por eso ayer la Gendarmería hizo el peritaje comparando la imagen congelada tomada por la cámara del locutorio con la foto que le tomó el diario Clarín cuando intentó entrevistarlo esta semana. El estudio hecho por la Gendarmería no confirma que el hombre de la llamada sea Alvarez, pero tampoco lo descarta. Por ello, Oyarbide lo citó para pasado mañana.

En el juzgado afirmaban anoche que, desde el punto de vista estricto de la causa judicial, la revelación de quién hizo la llamada anónima a Burstein sólo puede tener un efecto positivo en el expediente. El razonamiento sería el siguiente: se citará a Alvarez y en caso de que admita que hizo la llamada, se le preguntará cómo se enteró que Jorge “El Fino” Palacios estaba detrás de la operación de inteligencia y qué otros datos puede aportar.

Para Mauricio Macri y sus aliados, la movida intenta demostrar que fueron la SIDE, la Policía Federal y el gobierno nacional los que armaron la causa por las escuchas. En realidad, no significa un cambio relevante, porque el expediente de las escuchas no se basa en evidencias falsas, sino en pruebas categóricas que fueron ratificadas en distintas instancias:

- Se probó que en Misiones se armaban expedientes falsos involucrando a Sergio Burstein, al cuñado de Macri, Daniel Leonardo, al empresario Carlos Avila y a otros empresarios, abogados, esposas y amantes de empresarios. Se les imputaba algún grado de complicidad con los autores de un homicidio o de robos cometidos por piratas del asfalto.

- Ese armado de causas falsas no sólo fue corroborado por el juez Oyarbide, sino que la Justicia de Misiones destituyó a los magistrados que instruyeron esos expedientes y la policía provincial echó a los oficiales que intervinieron.

- Sobre la base de aquellos expedientes, los jueces misioneros dieron orden de intervenir esos teléfonos. Eso quedó probado en la causa de Oyarbide y en las de Misiones. Los jueces admitieron que ordenaron las escuchas, aunque adujeron que fueron engañados por Ciro James.

- Jorge “El Fino” Palacios se comunicó casi 200 veces con Ciro James, a veces en horarios asombrosos, que no tienen relación con el vínculo que –según dijo– tenía que ver con la incorporación de James a la Policía Metropolitana. Muchas de las comunicaciones se produjeron no bien Ciro James retiraba cintas de la SIDE. Hay secuencias en las que Palacios llamó a Ciro James, éste le devolvía el llamado, de inmediato se comunicaba con Misiones y luego las llamadas recorrían el sentido inverso.

- Uno de los espiados fue el cuñado de Mauricio Macri. El jefe de Gobierno nunca pudo explicar por qué su policía preferido, el Fino Palacios, y un hombre contratado de forma totalmente irregular en su administración, Ciro James, aparecen involucrados en las escuchas de su cuñado. Macri sugiere que el espionaje proviene de su padre, Franco, pero parece improbable que Palacios haya puesto en marcha las escuchas del cuñado de Macri sin el visto bueno del propio Macri.

- En el procesamiento del jefe de Gobierno también tuvo su peso el hecho de que Ciro James fue contratado en el Ministerio de Educación de manera más que sospechosa. No hay constancias de que haya hecho ningún trabajo, las personas que se supone que lo recomendaron niegan haberlo hecho, nadie lo vio en ese lugar de trabajo y tenía un contrato alto, 6000 pesos por mes.

- Palacios y Ciro James tienen procesamientos confirmados por la Cámara Federal e incluso su procesamiento y prisión preventiva fue ratificada también por la Cámara de Casación.

Ninguno de estos elementos cambia con la aparición de Alvarez. Es más, lo decisivo en la causa de las escuchas ilegales es la resolución que adopte la Sala I de la Cámara Federal respecto de Macri: si confirma o revoca el procesamiento dictado por Oyarbide, quien sindicó al jefe de Gobierno por espiar a su cuñado y a Burstein y, en ese marco, participar de la asociación ilícita que realizó las escuchas.

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