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A veintiún días de las elecciones en Mendoza, el radical Roberto Iglesias y el kirchnerista Francisco “Paco” Pérez disputan cabeza a cabeza la gobernación. Muy lejos en los sondeos aparece, en tercer lugar, el demócrata Luis Rosales, en una alianza con el PRO y Compromiso Federal.
La intención de voto a favor de Iglesias no es sencilla de medir: según los sondeos que maneja el propio radical, el 35 por ciento de su posible electorado no acompaña a su candidato a presidente, Ricardo Alfonsín, y por lo tanto lo votaría sólo cortando boleta. Como su ventaja sobre Pérez es exigua, si la proporción de corte a favor del radical fuera menor, el kirchnerista ganaría la gobernación.
En Mendoza, Ricardo Alfonsín obtuvo el 11,92 por ciento en las primarias, contra el 46,94 que sacó la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. En la última semana, ante la negativa por parte de la Junta Electoral mendocina al pedido del radicalismo de que todas las boletas provinciales fueran separadas de las nacionales, Iglesias se resignó a ir junto al candidato presidencial del radicalismo.
La campaña de Iglesias, centrada en un llamado a cortar boleta, provocó las críticas de la UCR: el presidente del Comité de la provincia de Buenos Aires, Miguel Bazzé, habló de una “actitud mezquina” por parte del candidato.
En contra de Pérez juega el desgaste de los casi cuatro años de gestión que lleva el actual gobernador Celso Jaque, de quien el candidato K fue ministro de Infraestructura hasta hace dos meses. La relación entre Pérez –a quien acompaña en la fórmula el también ex ministro de Derechos Humanos Carlos Ciurca– y el mandatario mendocino no es la mejor: en su momento Jaque no lo apoyó para que fuera candidato.
A Pérez lo beneficia la alta intención de voto de Cristina Fernández de Kirchner, quien podría traccionar a su favor. La Presidenta sacó en agosto el 46,94 por ciento y su cosecha podría superar el 50 por ciento en octubre. Además, el 62 por ciento aprueba la gestión de CFK. En esa sintonía se construyó la campaña de Pérez, que hace dos semanas se mostró con la Presidenta en un masivo acto en Mendoza.
Si bien el candidato de Compromiso Federal, Alberto Rodríguez Saá, quedó segundo en las primarias en Mendoza con el 20,33 por ciento de los votos, todo indica que el candidato a gobernador del Partido Demócrata correrá la misma suerte que aquellos que se nominaron por ese espacio desde 1983 hasta la actualidad: ninguno ganó. Los demócratas –por lo general, tercera fuerza mendocina– hicieron su mejor elección en 1999, cuando su candidato salió segundo, detrás del radical Iglesias.
Informe: Sol Prieto.
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