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Mauricio Macri pisó el territorio de José Manuel de la Sota para apuntalar a su propio candidato, el ex árbitro Héctor Baldassi. El jefe de Gobierno aseguró que “Baldassi será la próxima revelación política”, y vaticinó un resultado similar al que logró Miguel del Sel en Santa Fe. “Estamos abiertos al diálogo con todas las fuerzas”, sostuvo, a su lado, el comediante. Macri tampoco descartó, de momento, un acuerdo electoral con De la Sota. Sostuvo que el acuerdo en esa provincia “puede ser con De la Sota o con algún otro partido”. Los macristas sostienen que De la Sota tiene una corta distancia con Oscar Aguad y que requerirá los votos que le puede aportar Baldassi. Esperan que ese escenario lo lleve al gobernador a negociar con el PRO.
Macri visitó la exposición Mercoláctea junto con Del Sel, Baldassi y el ruralista Alfredo De Angeli, sus tres estrellas en las elecciones de este año. Sobre otra incorporación que busca, la del ex ministro de Economía Roberto Lavagna, se refirió brevemente: “Hablé con el ex ministro Lavagna y tenemos muchas coincidencias, pero un acuerdo es mucho más complejo”. “Nosotros tenemos candidatos como Gabriela Michetti, Horacio Rodríguez Larreta, Federico Pinedo, todos muy buenos para la Ciudad”, lo toreó. El acuerdo con Lavagna está en una impasse desde que se supo que a Macri no le gustó la foto que compartieron De la Sota, Lavagna, Hugo Moyano y Francisco de Narváez.
Esta vez no hubo foto de Macri con De la Sota, que es otro presidenciable para 2015 y que esta semana le birló al líder de PRO algunos dirigentes en Santa Fe. El jefe de Gobierno porteño dedicó su visita a respaldar a su candidato. “Es una persona común que quiere aportar a su país y con el prestigio que le dio su actividad como árbitro de fútbol”, sostuvo Macri sobre Baldassi. Aseguró, además, que formará para su gobierno en 2015 al “mejor equipo que haya tenido la Argentina desde los tiempos del ex presidente Arturo Frondizi, con gente que se arremangue y con sentido común”. A su alrededor tenía a un ex árbitro de fútbol, un capocómico y un rentista sojero.
El jefe de Gobierno aprovechó para cuestionar la exteriorización de dólares que promueve el kirchnerismo. “Ni ellos sabían cómo explicar el último blanqueo. Acá se busca tapar un problema con otro. En lugar de bajar la inflación, que afecta a los trabajadores, y defender el valor del peso, lo que hace este gobierno es mentir a través del Indec, echar la culpa a otros, colocar cepos cambiarios y blanqueos inexplicables”, acusó.
Baldassi aportó lo suyo: “Es increíble que se haya llegado a esta situación, que perjudica a un sector con tanta energía, tecnología disponible en el mundo y ganas de hacer y progresar”.
“El problema sigue siendo el mismo, hay que bajar la inflación y cuidar el salario de los que menos tienen”, sostuvo Macri, cuyo presidente del Banco Ciudad, Federico Sturzenegger, propuso una devaluación del 40 por ciento y luego se desdijo. “En los países que funcionan a nadie le importa cuánto vale el dólar, porque tienen una moneda en la cual creen, que no se devalúa en cinco minutos y los precios no cambian todos los días”, consideró Macri, quien no aclaró a cuáles países se refería. “El valor del dinero frente a las cosas de la vida diaria que uno tiene que comprar ha sufrido un deterioro fenomenal, esto está afectando al que menos tiene. Todo se origina en que el Gobierno le da a la maquinita”, indicó.
Sobre las eventuales alianzas, Macri indicó que está en busca de “dirigentes que provienen del peronismo, del radicalismo y de otros partidos”. Luego aclaró que sólo le interesan los que vengan con “propuestas para construir el futuro y no para discutir las macanas que hace la Presidenta”. El jefe de Gobierno dejó en claro que el PRO “es un espacio abierto” y que “no cierra ninguna posibilidad” de alianzas en la provincia. Le queda menos de un mes para la rosca.
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