Imprimir|Regresar a la nota
El país|Martes, 20 de enero de 2015
La muerte de Nisman > En una carta pública Cristina Fernández vinculó la muerte de Nisman con el trasfondo de la causa Amia

“Una historia larga, pesada y muy sórdida”

CFK denunció un intento por “desviar” y “tapar” el juicio por el encubrimiento del atentado, que se iniciaría en junio, y planteó interrogantes sobre el “¿suicidio?” del fiscal. Además criticó al Grupo Clarín y desestimó la denuncia en su contra.

Por Sebastian Abrevaya
/fotos/20150120/notas/na05fo01.jpg
La presidenta Cristina Fernández difundió su carta a través de las redes sociales Facebook y Twitter.

”¿Quién fue el que ordenó volver al país al fiscal (Alberto) Nisman el día 12 de enero, dejando inclusive a su pequeña hija sola en el aeropuerto de Barajas, interrumpiendo vacaciones familiares y licencia en el trabajo que había comenzado el 1º de enero y que debían finalizar más allá del 20?” El interrogante es la primera de una serie de preguntas que la presidenta Cristina Fernández realizó ayer en su primer pronunciamiento público luego de la muerte del fiscal de la causa Amia. Mediante una extensa carta difundida a las 20.30 vía Facebook y Twitter, la Presidenta expresó que “la muerte de una persona siempre causa dolor y pérdida” y que detrás del “¿suicidio?” de Nisman hay “una historia demasiado larga, demasiado pesada, demasiado dura, y por sobre todas las cosas, muy sórdida”. A través del texto titulado “Amia, otra vez: tragedia, confusión, mentira e interrogantes”, CFK advirtió sobre un intento para impedir el avance del juicio por el encubrimiento del atentado en el que están involucrados el ex presidente Carlos Menem, el ex titular de la SIDE, Hugo Anzorreguy, y el ex policía Jorge “Fino” Palacios, entre otros. “Hoy más que nunca no se debe permitir que una vez más se intente hacer con el juicio de encubrimiento lo que ya se hizo con la causa principal”, completó la Presidenta, para quien los autores del atentado se descubrirán cuando se sepa quiénes lo encubrieron.

La muerte de Nisman tomó por sorpresa al gobierno nacional, que venía preparando su participación en la reunión organizada por la oposición en la Cámara de Diputados, en donde pretendía defenderse ante el propio fiscal de sus acusaciones por el encubrimiento de los supuestos responsables iraníes en las 85 muertes de la mutual judía. La nota que subió CFK ayer en las redes sociales desandó un largo camino que se remontó, incluso, hasta los tiempos anteriores al atentado, durante la dictadura militar. La Presidenta recordó que dos días después de la explosión de 1994 fue designado como secretario de Seguridad de Santa Fe el brigadier Andrés Antonietti, que había cumplido tareas en Santa Cruz durante la dictadura militar.

CFK retomó también su actuación en la comisión investigadora –de la que participó como senadora nacional entre 1996 y 2001– cuando firmó “en soledad y con disidencia total” con su bloque que lo actuado por el entonces juez de la causa, Juan José Galeano, no pasaría por la prueba del juicio oral y público. “Hoy, después de casi ¡15 años! de iniciada la causa de encubrimiento y doce excusaciones de magistrados, se presume que ‘posiblemente’ (el encomillado no es casual) se inicie el juicio oral y público en el mes de junio de este año”, afirmó e inmediatamente detalló a los imputados por el encubrimiento: además de Galeano, Menem, Anzorreguy y Palacios, mencionó a los fiscales Eamon Müllen y José Carlos Barbaccia; al ex presidente de la DAIA, Rubén Beraja, al reducidor de autos Carlos Telleldín y a Carlos Corach, el ex ministro del Interior que fue sobreseído por el juez Ariel Lijo, pero cuya decisión fue luego revocada por la Cámara. Ahora, Lijo tiene a su cargo la denuncia que presentó Nisman contra el gobierno nacional (ver página 7).

“Curiosa y sugestivamente, cuando está a punto de iniciarse el juicio oral y público por encubrimiento, largamente demandado por la sociedad en general y los familiares en especial, surge el intento de convertir al gobierno que más ha hecho por el esclarecimiento del atentado en encubridores, por tratar de que se pueda tomar declaración a los imputados iraníes mediante un tratado internacional aprobado por ley del Congreso”, señala la Presidenta, en defensa del Memorándum de Entendimiento con Irán, que fue declarado inconstitucional. También aludió a las declaraciones de apoyo por parte del ex director general de Interpol, Robert Noble. “Se trata de desviar, mentir, tapar, confundir”, aseguró CFK.

“Si en aquel juicio (el del atentado) ‘desaparecían’ los cassettes que probarían que la SIDE estaba al tanto de que se estaba preparando un atentado, ahora ‘aparecen’ cassettes de personajes públicamente simpatizantes de Irán a los que ni siquiera es necesario intervenir un teléfono para saber lo que hacen o lo que piensan”, advirtió la Presidenta, en referencia a las escuchas telefónicas que Nisman dijo tener en su poder y en base a las cuales pidió su llamado a indagatoria.

Los interrogantes

Más allá de la cuestión del proceso judicial, la Presidenta sugirió a través de una serie de preguntas la puesta en marcha de operación política en la que también estaría involucrado el Grupo Clarín. Además de preguntarse sobre el motivo del regreso anticipado de Nisman al país, cuestionó que “sin avisarle” al juez Rodolfo Canicoba Corral presentara una denuncia de 350 fojas “que evidentemente debía tener preparadas con anterioridad”. “¿O será que alguien se las dio cuando volvió?”, remató sin dar precisiones. Fuentes del Gobierno señalaron al ex director de Operaciones de la Secretaría de Inteligencia, Jaime Stiuso, quien fue apartado del cargo en diciembre, al reemplazarse toda la cúpula de la SI. Stiuso mantenía vínculo con Nisman, según reconoció públicamente el propio fiscal.

La Presidenta también rechazó las versiones que indicaban que el regreso anticipado se debía a que la procuradora fiscal, Alejandra Gils Carbó, pretendía removerlo de su cargo al frente de la causa Amia. Remarcó, en cambio, que el propio Nisman “admitió que la Dra. Gils Carbó lo llamó para ofrecerle más protección y si necesitaba más custodia”.

“¿Es casualidad también que ese mismo día 12 que el fiscal regresa imprevistamente al país el diario Clarín titula: ‘Más de 4 millones de pie contra el terror en Francia’?” CFK cita la tapa posterior de ese diario, vinculada con una supuesta orden oficial de no asistir a la marcha contra el atentado a la revista Charlie Hebdo en París. Y por último, se pregunta si “es casualidad que la 3ª tapa secuencia de Clarín sea precisamente este hecho: ‘Amia, acusan a Cristina de encubrimiento a Irán’”. El argumento sugerido por la Casa Rosada es que hubo un intento por vincular el supuesto encubrimiento de la responsabilidad iraní en el atentado a la Amia con la postura del Gobierno en el atentado contra la revista francesa, realizado por un grupo extremista musulmán.

Respecto del caso puntual de la muerte de Nisman, CFK sostuvo que el Poder Judicial “DEBE” (sic) investigar el hecho de que haya sido un empleado de la fiscalía quien le suministre el día sábado el arma calibre 22 que le provoca la muerte. “¿Para defensa?, ¿Un arma calibre 22?”, vuelve a preguntar la Presidenta antes de señalar que el fiscal vivía en la torre Le Parc de Puerto Madero, que cuenta con sistemas de vigilancia inteligentes, códigos de ingreso, monitoreo de cámaras y custodia constante de Prefectura, además de los diez agentes de la Policía Federal que lo custodiaban personalmente. “Los delitos no tienen razones, sólo tienen móviles, y en Argentina todavía debemos explicar lo más obvio y simple”, finalizó Cristina en la carta donde pide justicia para las víctimas y familiares del atentado ocurrido hace 21 años.

Consecuencias políticas

Desde la Casa Rosada desestimaron el impacto de los hechos en la imagen del gobierno nacional, criticaron la actitud de la oposición e incluso arriesgaron que ellos van a “salir fortalecidos”. Hasta anoche no consideraban de magnitud tampoco las manifestaciones en Plaza de Mayo y algunas protestas acompañadas por sectores de la oposición. Respecto de la responsabilidad del oficialismo en la muerte de Nisman, reconocieron ser una parte de las presiones que sufría el fiscal, pero como consecuencia de una actitud defensiva. “El permitió que del otro lado sus nuevos jefes lo tengan agarrado de algo que no sabemos qué es”, afirmó un encumbrado dirigente del FpV. Por lo pronto, en el oficialismo esperan que la Justicia investigue las comunicaciones de Nisman de las últimas semanas para esclarecer algunos de los interrogantes planteados por CFK en su carta, así como por los legisladores oficialistas en su conferencia de prensa.

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar|República Argentina|Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.