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El Consejo de la Magistratura desestimó ayer dos denuncias, una contra el juez federal Daniel Rafecas y otra contra su par Norberto Oyarbide. Se trata, en el caso de Rafecas, de una acusación de mal desempeño en la causa que investiga la compra de la ex Ciccone Calcográfica, por un intercambio de mensajes de WhatsApp con el abogado de uno de los acusados. Y en el de Oyarbide, por la llamada “causa del anillo”.
El tratamiento del expediente de Oyarbide fue introducido en el orden del día del plenario por pedido de la oposición, a pesar de que no contaba con los votos para aprobar el dictamen.
Una vez que se aprobó por unanimidad incluir el expediente, el senador radical Angel Rozas hizo suyo un dictamen del ex consejero Mario Cimadevilla que proponía enviar a juicio político al juez federal, por haber exhibido un costoso anillo, acusándolo de hacer ostentación y afectar el decoro.
Por enviar a juicio político a Oyarbide votaron los jueces Luis María Cabral y Leónidas Moldes, los radicales Rozas y Gustavo Valdés (diputado) y los abogados Miguel Piedecasas y Adriana Donato.
En tanto, los representantes del Frente para la Victoria, Anabel Fernández Sagasti, Pablo González, Julián Alvarez, Héctor Recalde y Jorge Candis votaron por rechazar la denuncia, mientras que la jueza y presidenta del Consejo, Gabriela Vázquez, se abstuvo, y el senador kirchnerista Ruperto Godoy estuvo ausente.
“Discutimos cosas muchísimo más graves y creo que hay intereses deseados”, señaló el secretario de Justicia y consejero Julián Alvarez durante la votación. En este marco, calificó como una “exteriorización” la actitud del juez y la consideró insuficiente para impulsar un jury.
Así, el envío a juicio se cayó porque se requieren los dos tercios de los votos. Tras el rechazo, el juez Cabral propuso aplicarle a Oyarbide una multa del 30 por ciento del sueldo por única vez, para lo que se necesita mayoría simple de votos. La votación salió seis contra seis. Como en caso de empate el voto de la presidenta vale doble, el resultado terminó 7 a 6 por rechazar la sanción.
La denuncia que se desestimó contra el juez Rafecas lo acusaba de mal desempeño en la causa por presuntos delitos en el levantamiento de la quiebra de Calcográfica Ciccone. El expediente, que había sido presentado por el ex representante del Poder Ejecutivo Hernán Ordiales y sostenido por el consejero de la UCR Mario Cimadevilla, fue finalmente archivado porque vencieron los tres años que el Consejo tiene de plazo para resolver una denuncia contra un magistrado. Los radicales Rozas y Valdés y el abogado Piedecasas pidieron postergar el tema, pero el resto de los consejeros rechazó el pedido y se votó por su archivo. El organismo cerró además otra denuncia contra Rafecas por presunto mal de- sempeño en la desestimación una denuncia penal por la entrega de subsidios al cine.
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