“En los últimos meses hemos advertido intentos por negar el genocidio, reinstalar ´la teoría de los dos demonios´ y desprestigiar la lucha de los organismos de derechos humanos. Abierta o solapadamente, se trata de relativizar los crímenes aberrantes del terrorismo de Estado y poner en cuestión la lucha de los organismos. Vamos a seguir sosteniendo nuestras banderas. Vamos a seguir llevando genocidas ante la justicia, sean militares o civiles. Vamos a seguir reclamándole al Estado que mantenga las políticas de Memoria, Verdad y Justicia, y que nos brinde respuestas, como el hallazgo de los cuerpos de las miles de víctimas. Vamos a seguir construyendo esta democracia sin impunidad”, señalaron en un comunicado Abuelas de Plaza de Mayo, Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas e HIJOS Capital. 
Los organismos de derechos humanos respondieron así al comunicado de la secretaría de Derechos Humanos de la Nación, que, en respuesta al pedido de la ONG Ciudadanos Libres informó “oficialmente” que entre 1973 y 1983 hubo 8571 víctimas de terrorismo de Estado. “Vamos a seguir buscando a los centenares de nietos que todavía hoy están desaparecidos. Vamos a seguir reivindicando la lucha de nuestros seres queridos y gritando bien fuerte: ¡30 mil detenidos-desaparecidos presentes, ahora y siempre!”, señalaron. Tal como publicó PáginaI12, los organismos de derechos humanos señalan que el objetivo de reinstalar un “debate” sobre el número de víctimas es “desviar la atención”. Porque hablar de la cifra implica no hablar del plan de exterminio, sus razones y sus consecuencias sociales. “Los perpetradores ocultaron sus crímenes, los negaron y todavía hoy persisten en su silencio. La dictadura cívico-militar no sólo exterminó a miles de personas, sino que también aniquiló derechos, buscó destruir los lazos solidarios y a las organizaciones”, afirmaron.