Elisa Carrió anunció ayer que el ARI impulsará una consulta popular sobre la implementación de un ingreso universal para la niñez. “Si no logramos que los niños tengan un ingreso, no vamos a poder vivir en el futuro”, aseguró Carrió en la conferencia de prensa, donde aprovechó para criticar una vez más al gobierno de Néstor Kirchner.
“Una buena política de distribución del ingreso tendría que partir primero por los dos extremos: ingreso ciudadano a la niñez e ingreso ciudadano a la vejez”, sostuvo Carrió en la sede del Instituto Hannah Arendt junto a Elsa “Tata” Quiroz, secretaria general del ARI, y Eduardo Macaluse, jefe del bloque de diputados.
Allí, la chaqueña anunció la decisión de juntar firmas para impulsar en el Congreso la consulta popular sobre el ingreso universal para la niñez. “En el año ’97, la fecha de presentación del primer proyecto, había un 20 por ciento de chicos pobres; hoy es el 70 por ciento. Es necesario comprender que cuando no se pelea por las cuestiones elementales a tiempo, después es tarde. Hoy es tarde en relación al ’97. Pero puede ser irrecuperable si esta misma conferencia la hacemos en dos años. Si no logramos que los niños tengan un ingreso, no vamos a poder vivir en el futuro. Por eso después de tantos años que venimos insistiendo le pedimos a la sociedad que se comprometa con su firma para hacer una Argentina más justa”, sostuvo Carrió.
Consultada sobre la política social del Gobierno, Carrió respondió que “no tiene política de distribución del ingreso” y a continuación criticó los anuncios de aumentos salariales formulados ayer. “Los gobiernos tienen dos formas de legitimarse: el negocio de la obra pública y los anuncios en los aniversarios y a fin de año. Este es un gobierno de anuncios sin planificación a mediano plazo. Con semejante superávit fiscal, se deberían distribuir ingresos en el seno de la administración pública y no esconder el trabajo informal, porque se anuncian aumentos para los trabajadores formales que son los menos y encima se deja afuera al sector estatal”, concluyó Carrió.
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