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Evo Morales hizo conocer ayer al gobierno argentino su deseo de participar del acto, junto al venezolano Hugo Chávez, que movimientos sociales y piqueteros organizan para el viernes en el club Ferrocarril Oeste. Sin embargo, el presidente boliviano supeditó su presencia a que razones de agenda no demoren su regreso desde Japón, donde se encuentra de gira.
La eventual llegada de Morales al país no fue anunciada públicamente aunque sí confirmada en la tarde de ayer por voceros oficiales, a tal punto que el diputado Edgardo Depetri festejó por adelantado. “Me han informado que Evo estará en Ferro y eso es una enorme alegría”, señaló el referente del Frente Transversal Nacional y Popular (FTNP).
Depetri no sólo replicó la información proporcionada por distintas carteras del gobierno nacional sino también las que otorgaron fuentes diplomáticas bolivianas. En ambos casos, se anunció el “interés manifiesto” de Morales de ser parte del acto que tendrá como principal protagonista al venezolano Hugo Chávez y cuyo propósito es repudiar la visita de George Bush a la región.
La presencia de Morales también fue confirmada a la agencia oficial Télam por el consejero de la embajada venezolana en Argentina, Fabián Arráez, y la titular de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini. “Todos juntos vamos a gritar fuera Bush”, prometió.
No obstante el entusiasmo, alrededor de las 23, las mismas fuentes oficiales pusieron un signo de pregunta a raíz del largo viaje de Evo desde Japón hacia la Argentina, previa escala en Bolivia. “Nosotros lo invitamos, definitivamente queremos que venga. Y él nos informó que quería estar aquí junto a Chávez. Ahora todo depende de un conjunto de variantes ajenas a la voluntad de Evo”, señalaron a este diario muy poco antes de la medianoche.
Con o sin el presidente boliviano, ayer se debatían aspectos del acto en el barrio de Caballito. Las Madres de Plaza de Mayo tenían prevista para el escenario una gigantografía de Chávez con un fondo rojo. Aunque el publicista Jorge “Topo” Devoto llevó otra propuesta a Néstor Kirchner, con las imágenes del Che, Evita y Perón, con los colores nacionales celeste y blanco.
También se manifestaba cierta ansiedad en el Movimiento Evita, el Frente Transversal, la CTA, la Federación de Tierra y Vivienda, y Barrios de Pie, entre otras organizaciones sociales que participarán del acto. Sucede que aguardaban un respaldo financiero de Pdvsa para el alquiler de dos mil micros, pero hasta ayer no había confirmación alguna de ese aporte de la petrolera venezolana.
Ansiedades al margen, Depetri señaló que el acto “será la reafirmación del proceso de integración con Venezuela, con la recuperación del Estado en materia energética con los acuerdos entre Enarsa y Pdvsa y la derrota clara de las pretensiones de Estados Unidos de imponer el ALCA”.
A tono con la prédica de los organizadores, el legislador también vaticinó que “será un acto masivo, para dar una demostración de unidad de los movimientos sociales y respaldar a Chávez, al presidente Kirchner y un repudio masivo a la presencia de Bush en el Mercosur”, en alusión a la gira del mandatario norteamericano por Brasil y Uruguay.
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