Página/12 :: El país :: Duelo que no resiste el archivo

Francisco de Narváez y Roberto Lavagna le pusieron un poco de pimienta a la campaña electoral. El empresario y el ex ministro se cruzaron verbalmente por la decisión de la Corte Suprema de Buenos Aires de revisar la validez de las candidaturas de De Narváez y de Daniel Scioli. “Me duele que quienes hayan impulsado este pedido de queja hayan sido los partidos que adhieren a Lavagna, que un minuto antes de cerrar las alianzas me pedían que fuera su candidato a gobernador y un minuto después comenzaron con este jueguito”, sostuvo el candidato de Unión-PRO. En medio de una actividad de campaña para denunciar la inseguridad, Lavagna respondió que la suerte de la candidatura de De Narváez era “un tema menor”. Cuando los periodistas insistieron, afirmó que “un ricachón no va a venir a decirnos a los argentinos qué temas tenemos que discutir”.

El Colorado, como llaman los suyos a De Narváez, aseguró que Lavagna conocía que en primera instancia la Justicia electoral había aprobado su candidatura. “Lavagna supo perfectamente que la Junta Electoral me había aprobado la candidatura y quería que yo lo llevara en la boleta a él, no que él me llevara a mí, porque claramente le aportamos más votos a él que él a nosotros. No lo quise por cuestiones netamente políticas, ya que no creo en el proyecto que él tiene para la Argentina”, destacó De Narváez en su critica a Lavagna.

Las declaraciones de De Narváez, repetidas durante la mañana de ayer por varias emisoras, no tardaron en llegar hasta Lavagna. El candidato de UNA no ocultó su molestia. “El señor Francisco de Narváez que se arregle con la prensa y con los medios de prensa que tiene a su disposición. Es dueño de canales, de radios, que se arregle con sus medios”, fue la primera reacción de Lavagna cuando se le preguntó por las afirmaciones del empresario que tiene participación en el multimedios América y en el diario de negocios El Cronista Comercial.

Recompuesto, Lavagna remitió el tema a la Justicia, calificó a la polémica como “un tema muy menor” y continuó con su movida de campaña. El candidato cuestionó al Gobierno por “negar la inseguridad ciudadana, ya que no puede resolverla”. A pocos metros del estadio de River Plate, la Coalición UNA clavó 2115 cruces. La imagen venía a dar cuenta de la cantidad de víctimas que fallecieron el año pasado por hechos de violencia.

Para Lavagna, el Gobierno no puede resolver la inseguridad porque la niega. “Lo niega el Presidente, lo niega el jefe de Gabinete cuando dice que es una sensación, y lo niega el gobernador de una provincia importante cuando dice que hay más delitos porque hay más bienestar. Son demasiadas insensateces juntas”, concluyó.

DE NARVAEZ VS. LAVAGNA POR LA IMPUGNACION BONAERENSE

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