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Unas tres mil personas cortaron y ocuparon ayer el puente internacional Guzmán, que conecta La Quiaca con la localidad boliviana de Villazón, en protesta por la emergencia social y sanitaria en que se encuentra el norte de Jujuy. “La gente no tiene ni para comprar pan”, dijo el obispo Jesús Olmedo. En diálogo con PáginaI12, el prelado afirmó que la Gendarmería los intimó a desalojar el puente y por eso se dirigieron hacia el Concejo Deliberante y la Municipalidad. “Pero ahí también apareció la Infantería, armada hasta los dientes, fui a decirles que había mujeres y niños pero están dispuestos a reprimirlos”, denunció al cierre de esta edición. “Los productores del campo y el Gobierno están haciendo circo. ¿A dónde van a parar los millones de las retenciones? A los pobres no van porque les aseguro que aquí la gente se está muriendo de hambre”, agregó Olmedo.
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